En el furor de la industria de defensa, el pasado fue también positivo para General Dynamics en España. Su filial Santa Bárbara Sistemas quintuplicó su beneficio, hasta los 106,84 millones de euros. En 2024, tal y como se anunció en su momento, también logró un hito importante en su actividad en España: la renovación de la concesión demanial con el Ministerio de Defensa para sus fábricas en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) y Trubia (Asturias).
Desde julio de 2016, Santa Bárbara tiene el derecho de uso y explotación de estas instalaciones en virtud de una concesión demanial. Es decir, un permiso de la Administración para utilizar un bien público durante un tiempo determinado. Aunque inicialmente el contrato finalizaba en julio de 2026, el pasado año Defensa concedió una prórroga de esta concesión con vencimiento el 21 de julio de 2031. Además, estableció una posibilidad de prórroga de otros cinco años más, manteniendo inalteradas las condiciones.
Concesión
Ahora las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil desvelan lo que pagará al Gobierno por el uso de estas instalaciones. Serán 487.000 euros al año, de manera que en los cinco años del contrato abonará 2,435 millones. En este sentido, fuentes de la compañía explicaron a Artículo14 que este importe responde al mantenimiento de unas instalaciones declaradas Bien de Interés Público, lo que garantiza su mantenimiento y conservación. Toda la maquinaria y demás elementos de fabricación son propiedad de la compañía. Haciendo una similitud con un seguro, Santa Bárbara abona este importe a Defensa por el continente del edificio, ya que todo el contenido le pertenece.
En lo que va de año, la empresa ha invertido 11,8 millones en la ampliación de estas fábricas. En concreto, la compañía ha agregado 10.000 metros cuadrados de capacidad productiva a sus instalaciones, a los que “en breve” se sumarán otros 7.000 metros cuadrados para actividades logísticas. Ello ha supuesto además la contratación de 93 personas, con lo que la empresa cuenta con cerca de 1.200 empleados.
Suben las ventas en España

Desde su privatización en 2001 y venta a General Dynamics, Santa Bárbara Sistemas tiene al Ministerio de Defensa español como su principal cliente. En 2024, la sociedad obtuvo unos ingresos de 265,57 millones de euros, un 15,7% menos que el año anterior. El descenso se explica por la caída de las ventas a su filial de Reino Unido. De esta forma, el 69% de su facturación procede del mercado nacional. En concreto, TESS-Defence, la UTE liderada por Indra y en la que también participa SAPA que tiene como objetivo el desarrollo de los VCR 8×8, representó el 47% del total. Otros contratos con el Ministerio sumaron el 22%, mientras que el resto corresponde al mercado británico.
En su cuentas, Santa Bárbara también refleja que Defensa impuso a principios de 2024 una sanción de 9,196 millones de euros. Una cifra equivalente al 10% del valor del contrato por los retrasos en la entrega. La multa se repartió entre los tres miembros de la UTE en función de su participación. Esta penalización volvió a avivar las diferencias con Indra y SAPA (es a su vez accionista de la primera). Santa Bárbara fue el único socio que se mostró partidario de impugnar la resolución de Defensa, algo que finalmente no se hizo porque los demás no estuvieron de acuerdo.
Esta misma semana, el Ministerio de Defensa ha trasladado a Indra, accionista mayoritario de TESS con un 51% desde octubre de 2024, su preocupación por los sucesivos retrasos del programa de vehículos 8×8 para el Ejercito de Tierra. El Departamento que lidera Margarita Robles ha vuelto a advertir que se reserva las “acciones oportunas”.
General Dynamics

En España, además de Santa Bárbara -que concentra la actividad productiva-, General Dynamics cuenta también con otra sociedad: General Dynamics European Land Systems (GDELS), que presta servicios corporativos a las empresas del grupo. En 2024, triplicó su beneficio neto, hasta 472.392 euros; mientas que su facturación alcanzó 32,12 millones, un 8,46% más. El pasado verano, la compañía presentó su plan estratégico para el mercado español a cinco años, con una previsión de incremento de su actividad productiva del 73. Una de las opciones que avanzó fue expandir su actividad a Aragón, Cataluña y el País Vasco. En cuanto a la capacidad productiva, la intención es fabricar hasta 565 vehículos militares al año en 2030, frente a los 315 actuales, si bien la empresa no ha definido el volumen de inversión que destinará para alcanzar esa meta, aunque ha subrayado que será “importante”.
En julio, la compañía anunció un acuerdo para integrar los sistemas antidrón de la aragonesa Mecanus Innovación en sus blindados, además de reanudar en Trubia la producción de cañones de 120 milímetros de calibre para los tanques Leopard 2E del Ejército español, tras un acuerdo con la alemana Rheinmetall.
Pendientes de los futuros contratos
Con este punto de partida, la compañía al igual que su rival Indra tiene en el punto de mira los futuros contratos del Ministerio de Defensa para Fabricación Avanzada en Movilidad Terrestre Sostenible II, que implica la adquisición de un sistema obús autopropulsado; y la adquisición de 116 Vehículos Lanzapuentes Ruedas.
Según informó Artículo14, GDELS-Santa Bárbara Sistemas presentó sendas ofertas no solicitadas al Ministerio de Defensa. El cronómetro está en marcha, porque deben adjudicarse antes de fin de año para poder contabilizar la inversión tal y como exige la OTAN. Entretanto, la eventual participación o no de Santa Bárbara será también determinante para el futuro a largo plazo de sus instalaciones en España. De momento, hasta el 31 de julio de 2036, tranquilidad está garantizada: el uso de Trubia y Alcalá de Guadaira seguirá vigente.