El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha cargado duramente contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acusándole de utilizar el sufrimiento del pueblo gazatí como “excusa” para tapar sus carencias políticas y los problemas judiciales que afectan a su entorno familiar y político. Almeida rechazó cualquier forma de violencia en las manifestaciones celebradas en torno a la Vuelta Ciclista a España, aunque reconoció la legitimidad de quienes se movilizan pacíficamente por la situación en Gaza.
En su intervención en el Foro Nueva Economía, Martínez-Almeida sostuvo que el Ejecutivo busca proyectar una imagen de disturbios en la capital para desviar la atención de los problemas internos del Gobierno. En este sentido, defendió que Madrid “volverá a ganar en las urnas” frente a quienes, a su juicio, aspiran a “reventar el modelo de convivencia” de la ciudad más abierta de España.
En este contexto, sostuvo que Sánchez busca “avivar disturbios en Madrid” para generar una imagen de enfrentamiento en la capital, al tiempo que criticó su discurso hacia Israel, defendiendo que es posible condenar la situación humanitaria en Gaza sin negar el derecho de Israel a defenderse frente a Hamás.
Además de esta confrontación política, el regidor madrileño reivindicó el modelo de la ciudad como un espacio de libertad, convivencia y calidad de vida, resaltando su ambición de consolidarse como referente internacional en crecimiento económico, sostenibilidad y cohesión social. Subrayó especialmente el esfuerzo en políticas de vivienda, con el objetivo de ampliar el parque público y liderar en Europa la construcción de vivienda asequible, frente a lo que calificó como el fracaso de la Ley estatal de Vivienda.
En definitiva, Almeida defendió que Madrid seguirá siendo una ciudad abierta y próspera, y advirtió al Ejecutivo de que la respuesta ciudadana llegará en las urnas, no en la calle, donde, afirmó, “volveremos a derrotarles con democracia y civismo”.
El acto contó también con la intervención del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien culpó directamente a Sánchez de los “actos de violencia” ocurridos en la última etapa de La Vuelta, que terminó con cargas policiales, dos detenidos y más de una veintena de agentes heridos. Feijóo acusó al jefe del Ejecutivo de dejar “solos” a los policías nacionales y de someter al país a un “nuevo escándalo diario” alentado por ministros y socios del Gobierno. “España ha hecho el ridículo internacional televisado”, lamentó, reclamando que el presidente “respete a los ciudadanos, a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a la reputación internacional del país”.