Una vez despejada la incógnita del quién -Juanfran Pérez Llorca- hay dos pantallas a superar en los próximos días en la Comunidad Valenciana. Las negociaciones entre PP y Vox y la fecha de la investidura del nuevo sucesor de Carlos Mazón. El PP valenciano empieza a dar síntomas de optimismo sobre la negociación con el partido de Santiago Abascal. “Está todo cerrado y con un lazo”, aseguran a Artículo14 fuentes conocedoras de las negociaciones. Es el propio Pérez Llorca quien ha tomado ahora las riendas de la negociación, previas conversaciones con el actual gobierno en funciones.
De hecho, además de trabajar ya por la investidura, en el equipo de Pérez Llorca miran al camino por recorrer para culminar el proceso de reconstrucción. No se esperan que, para la recta final de la legislatura, Llorca esté pensando en realizar grandes cambios dentro del Consell. Es parte del acuerdo al que ha llegado en los últimos días con Mazón. De hecho, la crisis de Gobierno, la acometió el todavía presidente en funciones con la salida del vicepresidente de la reconstrucción, Francisco José Gan Pampols.
En Génova mantienen la discreción después de haber designado con el dedo al candidato y delegan ahora el devenir de las negociaciones al partido regional. De fondo, Génova quiere evitar que el impacto de los contactos con Vox pueda pasar factura a la campaña extremeña que empieza el próximo 5 de diciembre.

Es Vox quien en estos momentos quiere poner en el foco las negociaciones, mientras el PP valenciano evita darles publicidad. Es Abascal quien ha escenificado que para investir como presidente al hasta ahora alcalde de Torrent se debe abrir una negociación política. Sus trece diputados son imprescindibles para evitar un adelanto electoral. En el PP valenciano cuentan con que Vox quiera exhibir su “posición de fuerza”, justo en un momento en el que los populares atraviesan un momento de debilidad a causa de la dimisión de Mazón. A las líneas rojas de Vox, Abascal ayer sumó una nueva condición: la ejecución de obras hidráulicas en el territorio. “Diques y presas”, en palabras de Abascal. Los populares ya se comprometieron tras la DANA en su “plan Valencia” a invertir casi 3.000 millones de euros en infraestructuras hídricas.
Los presupuestos, la base del pacto
Sin embargo, fuentes conocedoras de las negociaciones por parte del PP, aseguran que está “todo negociado” y creen que no habrá demasiadas dificultades en los próximos días. “Vox nos había confirmado, ya que íbamos a firmar unos nuevos presupuestos (los de 2026). Nos habían dicho que iba a haber pacto”, aseguran. Una negociación que, indican, había llevado Carlos Mazón en primera persona y que se había paralizado por la cercanía del aniversario de la DANA. Ahora, las fuentes consultadas aseguran que es Pérez Llorca quien se ha puesto en frente ya de las negociaciones con Vox. Al cierre de esta edición, la discreción era máxima sobre los contactos.

Las fuentes consultadas creen que Vox no les pondrá “demasiadas piedras para cruzar el río” y aventuran que requerirán que Llorca explicite en su discurso “lo de siempre”, en referencia a rechazar la política verde europea. Ya lo hizo el propio Mazón para cerrar los presupuestos de 2025.
Precaución en Génova
Con optimismo controlado respiran en la dirección nacional del PP donde siguen muy pendiente de que Abascal suba o baje el pulgar. Aunque, el propio órdago de Abascal a Sánchez desde la tribuna del Congreso tranquilizó al PP. El líder de Vox convidó al presidente del Gobierno a celebrar elecciones generales y entonces forzaría el adelanto electoral en Valencia. “Y Sánchez no va a sacar las urnas”, constatan en Génova.
Eso sí en Génova dicen dejar a Pérez Llorca la batuta de las negociaciones. Los límites “la Constitución”, aseguran en el entorno de Feijóo, donde sí que exigen a Valencia verse “reconocidos” en el acuerdo. La precaución en Génova pasa porque las negociaciones no salpiquen a la campaña electoral en Extremadura, a la que Génova fía un revulsivo en sus siglas.

Sobre el territorio los populares empiezan a poner el foco en la fecha de investidura. Será a partir del 24 de noviembre. Y la fecha es importante también. El objetivo es que Pérez Llorca encare su discurso y debate de investidura después de haber comparecido delante de la jueza de Catarroja, que le ha citado el próximo 21 de noviembre. Su convocatoria responde a las llamadas que le realizó el día de la DANA la entonces consejera de Emergencias, Salomé Pradas. En el entorno del candidato minimizan el impacto de su comparecencia.
De fondo, mientras se despejan las incógnitas sobre el “día D” a Carlos Mazón, el presidente en funciones compareció el martes en las Cortes Valencianas para dar explicaciones sobre la gestión de la DANA y el próximo lunes hará lo propio en el Congreso de los Diputados para dar explicaciones en la comisión de la DANA, tal y como ha podido confirmar este diario. Una semana después tendrán que ir a la citada investigación la vicepresidenta del Consell, Susana Camarero y el presidente de la Diputación de Valencia, Vicente Mompó.



