Jordi Pujol se encuentra ingresado en la Clínica Sagrada Familia de Barcelona a consecuencia de una infección pulmonar, una neumonía. El ingreso hospitalario llega justo cuando falta una semana para que empiece en la Audiencia Nacional el juicio contra el expresidente de Cataluña y sus hijos por asociación ilícita y blanqueo de capitales.
Antes de que comience el juicio, la Audiencia debe decidir si el expresidente es apto para declarar y desplazarse hasta Madrid después de que un médico forense lo haya examinado en los últimos días.
La familia ha pedido que el expresidente declare a distancia después de presentar varios informes médicos que demuestran que Pujol tiene marcadores de Alzheimer en la sangre y una severa alteración de la memoria verbal que lo lleva a confundir hechos y personas. Si los magistrados consideran que no está en condiciones de declarar, archivarán el procedimiento contra él, pero no contra su familia.


