Margarita Robles, al frente de casi un millar de soldados españoles en la zona de tensión

Trabajan en labores humanitarias en la llamada "línea azul". De 650 efectivos desplegados en Líbano, 41 son mujeres

Margarita Robles
La ministra de Defensa Margarita Robles durante su visita al Mando de Operaciones en Pozuelo de Alarcón, Madrid, para recibir un punto de situación sobre la misión en el Líbano. EFE/ Mariscal

España está muy presente en la zona de conflicto en Oriente Medio, con presencia de nuestras Fuerzas Armadas principalmente en Líbano y en menor medida en Irak. De ahí que, pese a estar en un segundo plano mediático -la respuesta al ataque de Irán a Israel ha llegado de momento por parte de Pedro Sánchez y José Manuel Albares-, el papel de Margarita Robles es especialmente relevante.

Actualmente, hay alrededor de 650 militares desplegados en el Líbano, informan desde el ministerio de Defensa. No se concreta el número de mujeres, ya que en el recuento de efectivos no se hace una separación por sexos. No obstante, fuentes del Ejercito de Tierra informan que 41, de los 650 efectivos desplegados allí, son mujeres. El resto de soldados hasta llegar el millar está en Irak.

Fuentes del departamento de Margarita Robles consultadas por Artículo14 informan de que “pese a la difícil situación”, las Fuerzas Armadas están haciendo “un magnífico trabajo”.

El general Arnoldo Lázaro es el jefe de la Misión de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano y el teniente general Agüero Martínez es jefe de la misión de la OTAN en Irak. “Sumando ambas misiones, unos 1.000 efectivos que están realizando un excepcional trabajo”, remacharon las fuentes consultadas del equipo de Robles, informa Pablo Montesinos

El papel de España en Líbano

La misión de nuestras tropas en Líbano es contribuir a que se cumpla la resolución 1701 de Naciones Unidas, que apela al cese de hostilidades entre Israel y el Líbano. Es decir, controlar la llamada “línea azul” en la demarcación fronteriza entre Líbano a Israel al sur del río Litani, y facilitar la ayuda humanitaria en dicha zona.

Las Fuerzas Armadas españolas llevan desplegadas en la zona desde 2006. Este contingente que llegó a contar con un máximo de 1.100 militares, oscila entre 600 y 700 desde 2012. Se encuentra ubicado concretamente en la base “Miguel de Cervantes”, cerca de la localidad de Marjayún en la que se encuentra el Cuartel General del sector Este, que lidera España. En el Cuartel General de la misión en Naqoura también hay tropas españolas desplegadas.

Hasta el momento, y a falta de conocer la respuesta israelí al ataque iraní del pasado sábado, la misión de las tropas españolas es realizar patrullas a pie y en vehículo para vigilar permanentemente la línea de separación, informa el Ministerio de Defensa. También, establecer observatorios y colaborar con las Fuerzas Armadas Libanesas.

La respuesta de España

En el plano político, España sigue con “angustia” y “enorme preocupación” los acontecimientos que se viven en Oriente Medio, según el Ejecutivo. Tras una primera respuesta en la que Moncloa no usó la palabra “condena” para referirse al ataque de Irán, unas horas después tanto Pedro Sánchez como José Manuel Albares, su ministro de Defensa, sí que la utilizaron, al tiempo que reclamaron “responsabilidad y contención” a los líderes internacionales. Margarita Robles, la titular de Defensa, está en contacto permanente con nuestras ropas desplazadas en la zona.

“Tras una larga y angustiosa noche -la del sábado- en la que se ha confirmado la escala del ataque perpetrado por Irán, el Gobierno de España lo condena, como ha condenado y condenará siempre toda forma de violencia que atente contra la seguridad y el bienestar de civiles inocentes”, afirmó Sánchez en las redes sociales, en un mensaje tanto en español como en inglés. “La respuesta de todos los líderes internacionales exige responsabilidad y contención. Debemos aprender de la historia y hallar una forma de resolver los conflictos por la vía diplomática, evitando a toda costa una escalada aún mayor”, añadió.

Por su parte, Albares aseguró que pese a la tensión en la zona la comunidad española que vive en Oriente Próximo “está bien” y que las embajadas nacionales en la región se encuentran “operativas”, tras el ataque de Irán a Israel, informa Europa Press. También el ministro usó la palabra condena el domingo: “Condenamos los ataques de Irán contra Israel que constituyen un paso muy grave hacia la escalada regional. España sigue comprometida con la estabilidad regional y la paz. La contención es indispensable. La colonia española está bien. Nuestras embajadas en la región operativas”.

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