La reaparición de Santos Cerdán ha sido tan fugaz como inesperada. El secretario de Organización del PSOE compareció el martes por la tarde ante los medios de comunicación para afirmar que desmontará las conclusiones del documento en el que trabaja la UCO, y sobre el que informó el jueves Artículo14. En el texto, la Guardia Civil apunta a que la trama del caso Koldo le habría pagado dos vehículos al número tres del PSOE.
En algo más de dos minutos, en declaraciones en el patio del Congreso de los Diputados, y sin aceptar preguntas de los periodistas, Cerdán afirmó que las diversas informaciones publicadas estos días “son todo mentiras”. Rechazó con bajar al detalle y amenazó con acciones legales a quienes le hayan imputado delitos en estas jornadas.
“Las noticias que se están dando son mentiras, y cuando salga ese supuesto informe de la UCO, lo desmontaremos” si incluye “estas mentiras”, apuntó. No obstante, el número tres del Partido Socialista puso en duda que las publicaciones efectivamente correspondan a la filtración de un informe del Instituto Armado. “O es una filtración o son invenciones de los periodistas”, aseveró.
El también diputado por Navarra precisó que esta cuestión “está en manos de los abogados” y aseguró que emprenderá acciones contra quienes “han afirmado” que él cometió “delitos”. “Nos veremos en los juzgados”, zanjó.
En otro orden de cosas, El Confidencial publicó el lunes que distintos mensajes incautados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, vincularían a Cerdán con supuestas adjudicaciones a la empresa Acciona.
En sus declaraciones en el patio de la Cámara Baja, Cerdán ha reconocido que “como diputado de Navarra” sí ha hecho “muchas veces preguntas sobre obras en Navarra”.
“Y como coordinador territorial del Partido Socialista el año 2020, también preguntaba por obras en el resto del territorio”, dijo, “como han hecho los 350 diputados que hay aquí, en el Congreso de los Diputados”. “Ninguna de esas [gestiones] es constitutiva de ningún delito”, añadió.
Cerdán, que no suele prodigarse ante cámaras y micrófonos, ha reaccionado así a las publicaciones. Hasta el momento, el Gobierno ha cerrado filas y ha puesto “la mano en el fuego” por el secretario de Organización socialista, en palabras del ministro Félix Bolaños. La situación es incómoda para el Ejecutivo y el partido, y la línea de defensa pasa por señalar la campaña de “acoso” que padecen.
“Hartos de la cacería, del acoso permanente”
La inmediata respuesta del PSOE a la primera publicación fue denunciar la “indefensión” de Cerdán, que esperará a pronunciarse en detalle cuando conozca la literalidad del informe de la UCO.
Fuentes de Ferraz defendieron este martes que “no hay nada delictivo” en las actuaciones del secretario de Organización socialista, y precisaron que el informe no puede estar centrado únicamente en su figura. “No pueden investigarlo a él, es aforado”. Es posible incluir en él conversaciones en las que participara, pero no pueden investigarle, apuntan.
“Estoy harto de esta cacería”, de este “acoso permanente”, denuncia un dirigente socialista. Lamenta la “brutal desigualdad” entre sus fuerzas y los “poderes” que “manejan muchísimo dinero y medios”, que “pueden poner en muchas portadas lo que les da la gana”. Mientras no conozcan el informe, los socialistas avanzan que seguirán sintiéndose indefensos.
El viernes, Cerdán hizo público un incidente con una periodista que se personó en su domicilio particular, en el que estaba presente su esposa. El episodio, que el PSOE asegura haber denunciado, generó a su secretario de Organización y a su esposa un importante malestar. Este martes volvió a su escaño porque tenía que votar, pero de momento no quiso responder preguntas.