El 13 de septiembre la Iglesia católica recuerda a varias figuras relevantes de su tradición, entre ellas a San Amado, un nombre que en España comparten más de 1.600 hombres y que tiene un significado profundamente simbólico: “amado por Dios”.
La vida de San Amado de Sens y San Amado de Sion
En esta fecha se conmemoran dos santos con el mismo nombre. El primero, San Amado de Sens, está ligado a la ciudad francesa de Sens, y su memoria ha perdurado en el calendario litúrgico durante siglos. El segundo, San Amado de Sion, vivió en el siglo VII y fue obispo en lo que hoy corresponde a Suiza. Se sabe que ejerció su ministerio hacia el año 660, aunque gran parte de su biografía permaneció en el anonimato hasta que, dieciséis años después, el rey Thierry III de Austrasia lo desterró al monasterio de Péronne. Allí coincidió con San Ultán, abad del lugar y hermano del fundador San Fursey.
Tras la muerte de San Ultán en el año 686, Amado quedó bajo la custodia de San Mauronto, en la recién fundada abadía de Breuil, en Flandes. Durante su traslado a este nuevo destino, cuenta la tradición que pidió detenerse en una iglesia cercana para cambiarse de ropa. Sin disponer de dónde colgar su capa, la depositó sobre un rayo de sol que entraba por una pequeña ventana, un hecho considerado milagroso por sus contemporáneos y que reforzó la fama de santidad que ya lo acompañaba.
Lejos de rendirse ante la adversidad de su exilio, Amado llevó una vida de recogimiento y oración, animando a los monjes del monasterio a vivir en humildad y devoción. Habitó durante años en una celda junto a la iglesia, entregado a la contemplación, hasta su fallecimiento hacia el año 690. Aunque en la Edad Media surgieron confusiones entre su vinculación con Sens y Sion, la tradición ha terminado por reconocerlo como obispo de esta última diócesis, en el valle de Valais.
Santos y beatos del 13 de septiembre
Además de San Amado, el santoral católico recuerda hoy a otras figuras que dejaron huella en la historia de la fe:
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San Marcelino de Cartago
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San Juan Crisóstomo, uno de los Padres de la Iglesia y reconocido por su elocuencia y profundidad teológica
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San Venerio de Tiro Maggiore
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San Julián de Ancira
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San Emiliano de Valence
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San Maurilio de Angers
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San Litorio de Tours
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Beata María de Jesús López de Rivas, carmelita descalza y discípula de Santa Teresa de Jesús
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Beato Aurelio María Villalón Acebrón
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Beato Mariano de Jesús Euse Hoyos, sacerdote colombiano conocido por su entrega pastoral
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Beato Claudio Dumonet
El sentido del santoral
Cada día del calendario, la Iglesia recuerda a hombres y mujeres que destacaron por su fe, su testimonio cristiano y, en muchos casos, por haber sufrido persecuciones. El santoral es, en este sentido, una invitación a no olvidar sus ejemplos y a mantener viva la memoria de quienes se convirtieron en referentes espirituales. El 13 de septiembre, con la figura de San Amado en primer plano, es un día que recuerda cómo incluso en medio de la adversidad y el destierro, la fe y la humildad pueden dejar un legado que trasciende siglos.