Generación conectada

Siete anuncios clave que cambiarán el panorama de la IA

Siete anuncios clave en solo siete días confirman el ritmo imparable de la inteligencia artificial y su impacto global en la economía

La inteligencia artificial no avanza, ¡vuela! “Un mes de hoy es equivale a una década tecnológica de antes” me decía un amigo hace unos días. Esto no es una revolución más, ni otra campaña mediática. Se trata de la mayor transformación económica, industrial y social del planeta. Procuraremos no quedarnos atrás.

La historia se escribe a un ritmo que ni la política ni la regulación consiguen seguir la pauta. En tan solo siete días, hemos asistido a la llegada inminente de humanoides a nuestras casas, de agentes autónomos que trabajarán para nosotros, de nuevos macrocentros de datos en Estados Unidos e incluso en el espacio, según Jeff Bezos.

Si el COVID o Filomena nos pillaron por sorpresa y nos dejaron sin palabras, preparaos: lo que nos viene encima es un nuevo orden tecnológico de otra escala.

Figure AI presenta el humanoide para nuestras casas

La compañía estadounidense Figure AI desveló esta semana su nuevo modelo de robot humanoide, el Figure 03. Si sus anteriores versiones estaban diseñadas para echar una mano en líneas de producción o fábricas, el nuevo modelo está destinado a irrumpir pronto en los salones o cocinas de nuestras casas.

Con desplazamientos y movimientos más ágiles y una expresión más humana, este robot se encargará de realizar buena parte de nuestras tareas cotidianas. Pasar el aspirador, recoger la mesa o acordarse de regar las plantas podrían ser sus principales faenas. En países como España, con una población cada vez más veterana y un problema de profesionales del sector del cuidado a ancianos, este tipo de robot social podría convertirse en una pieza clave de la asistencia y de nuestra economía diaria.

Lo decía en esta columna, hace tan solo unos días. Estamos a punto de vivir una “artificracia” donde deberemos aprender a convivir los humanos y las máquinas.

ChatGPT lanza su propia tienda de aplicaciones

Steve Jobs fue realmente un visionario, un precursor donde los haya. Celebrados recientemente los catorce años de su desaparición, sus inventos o ideas siguen muy de moda. Uno de sus ingenios fue el lanzamiento de su tienda de Apps para iOS, que hoy sigue marcando tendencia.

Sam Altman, fundador de OpenAI (ChatGPT), anunció la integración de las aplicaciones más usadas en el mundo, en su propia tienda de ChatGPT. Aunque esta nueva función esté únicamente disponible para los usuarios “de pago”, se irá desplegando a todo tipo de usuarios de la herramienta.

Ya no nos quedaremos en conversar con nuestra IA, ni pedirle que nos ayude a planificar nuestro año comercial, nuestras vacaciones o gestionar un conflicto con tu mejor amiga, sino que ahora podremos conectar muchas de nuestras herramientas de trabajo, hojas de cálculo, bases de datos o apps favoritas.

En un país donde el tejido empresarial está compuesto esencialmente por pymes, este cambio supondrá la democratización de la automatización, reducir drásticamente sus costes y tiempos, sin necesidad de contratar técnicos especializados.

Las “apps de ChatGPT” tendrán dos vertientes. Por un lado, unas integraciones de aplicaciones ya muy conocidas como Gmail, Calendar, Spotify, etc., o la posibilidad para las empresas de crear sus propias apps personalizadas dentro del propio ChatGPT. ¡Ay! Si Jobs levantara la cabeza.

Pero OpenAI no se queda ahí y ha anunciado otra revolución muy “gorda”. El lanzamiento de Agent Builder, una fábrica de agentes inteligentes. Unos agentes virtuales que pueden trabajar en tu lugar, pasándose incluso por ti, en formato de textos, videos, mails o voz telefónica. Pueden aprender, pensar y actuar para completar objetivos que habrás previamente definido. Contestar a solicitudes de información, analizar tus ventas mensuales, darte un toque cuando gastas mucho, o lo que tú le pidas para hacerte la vida más sencilla.

OpenAI irrumpe en redes sociales

Hace tan solo unas semanas contaba a los lectores que la firma detrás de ChatGPT estaba preparando el lanzamiento de su propio “LinkedIn con Inteligencia Artificial” y de lo que podría suponer para las demás redes sociales profesionales. Pues hoy os traigo el lanzamiento de Sora2, su nueva red social basada en generación de vídeos con inteligencia artificial.

Habréis visto ya algún vídeo de Michael Jackson cantando en una cafetería o de un mono peleando con un cocodrilo para salvar a un perro de sus garras. Unas imágenes tan hiperrealistas que confunden a informativos y a la gran mayoría de las personas. Esta nueva versión de Sora demuestra lo rápido que avanza la tecnología en generación de clips con audios sincronizados. La herramienta también introduce funciones que permiten insertar a personas reales en escenarios totalmente artificiales.

Todos estos avances encienden un debate global sobre los derechos de imagen y de autor en un contexto en el que los gobiernos se ven desbordados por tantas innovaciones. Tardan demasiado en definir sus marcos regulatorios.

OpenAI firma una alianza estratégica con AMD

Por supuesto, todo este entramado tecnológico, todos estos robots, tiendas de aplicaciones o agentes no se sostienen en una tecnología caduca. La IA vive gracias a unos chips cada vez más actualizados y potentes. Los microprocesadores llevan años siendo un elemento de primera importancia en la economía geopolítica. Sin chips, ya no somos nadie. Ni nada.

En este sector suenan mucho dos nombres últimamente, NVIDIA y AMD. En nuestro caso de hoy el protagonista es AMD que ha firmado una alianza con ChatGPT. Permitiría a la empresa líder en inteligencia artificial, reducir su actual dependencia del otro proveedor llamado NVIDIA.

Este acuerdo es más que un sencillo asunto de hardware y piezas informáticas. A medida que la IA se convierte en una herramienta crítica en nuestras vidas diarias, móviles e informática incluidas, las minas de materia prima y proveedores de chips se convierten en una seria baza para cualquier país o empresa. Afecta también de lleno a las relaciones entre las dos mayores potencias, Estados Unidos y China.

China bloquea la importación de chips de Estados Unidos

Efectivamente, no hay semana en la que Trump y China no tengan una sonada refriega. Mientras Donald vuelve a amenazar con aranceles al gigante asiático, el gobierno chino anuncia el bloqueo de la importación de chips americanos.

El trasfondo está claro: la IA ya no es solo una batalla por el dominio tecnológico del planeta, sino también por todo lo demás, ya que la informática está presente en cada instante de nuestras vidas. Hacerse con las principales minas de África no fue una apuesta absurda por parte de China.

Hoy sin ellas, no se puede fabricar ni un chip, ni un ordenador, ni un iPhone, ni una tableta. La república comunista china domina el mundo de forma silenciosa, hasta que de vez en cuando da un golpe sobre la mesa.

Cualquier movimiento suyo puede alterar la cadena global de suministros, encarecer la producción, entregas de coches o de maquinaria, por todo el planeta. Lo vimos ya durante la pandemia. Para Europa en su conjunto, esto significa la necesidad urgente de definir una estrategia tecnológica propia. Si no, dependeremos del humor y vaivenes de los dos grandes gigantes a la cabeza.

Musk se burla de Microsoft y lanza Macrohard

Ser el hombre más rico del mundo te permite mirar a todo el mundo con cierta prepotencia. Es lo que pensará Elon Musk desde lo alto de sus más de 300.000 millones de dólares de fortuna. Tras unas semanas relativamente calladito, el dueño de SpaceX, Tesla (y unas cuantas empresas más) volvió a la carga. Anunció la creación de Macrohard, una empresa de software basada íntegramente en desarrollos realizados con la inteligencia artificial.

Podrá generar esos agentes especializados de los cuales hablábamos antes, programar softwares, generar imágenes, vídeos, etc., y hasta sustituir el trabajo de empleados humanos. Su apodo actual (no oficial) es un guiño con mala uva a Microsoft, una de las mayores empresas americanas.

En paralelo, ha anunciado la ampliación de su centro de datos de Memphis, llamado Colossus 2. Este nuevo data center le permitirá competir directamente con OpenAI (ChatGPT) y Google (Gemini). La carrera para ostentar de estos gigantescos cerebros digitales ya no es solo cuestión de dinero o talento, es una cuestión de tener la capacidad energética y de almacenamiento. Aquí tampoco Europa cuenta con actores relevantes, pero si nuestro país atrae a grandes firmas a Andalucía y Extremadura por su poder de generar energía renovable y barata.

Bezos quiere mandar la IA al espacio

Jeff Bezos, fundador y máximo accionista de Amazon, ha demostrado su interés por el espacio a través de Blue Origin y es el único en rivalizar con Musk y su programa espacial SpaceX.

Su última revelación es que está planeando mandar centros de datos al espacio. Hay que saber que los data centers requieren una energía ingente, una refrigeración constante y un consumo de agua terrible. Según él, se podría mandar los servidores al espacio en macro estaciones orbitales que sacarían la energía desde paneles solares y disfrutar de una refrigeración natural al estar por debajo de los 100 grados espaciales. Tras haber revolucionado el mundo del comercio electrónico, podría estar proponiendo una solución sostenible al planeta y afrontar el espinoso problema del consumo energético e informático.

Más allá de sus beneficios ecológicos abre un debate sobre el peligro que tendría tener esas estructuras volando por encima de nuestras cabezas, así como sobre los marcos regulatorios del tratamiento de datos ya que no dependerían de ningún país aquí abajo o regla escrita.

Parece que el futuro de la IA ya no volará: flotará. Bezos y Musk, dos de las mayores fortunas del planeta, lo han entendido desde hace décadas. Altman de OpenAI, por su lado, no se queda atrás copando, día tras día, la actualidad. La IA no espera. Cada semana aparecerán nuevas iniciativas que cambiará, directa o indirectamente, nuestras vidas de terrícolas.