Entrevista

La capitán Laura Romero de Ávila, psicóloga de la UME: “Los militares están hechos de otra pasta”

La también militar admite que los miembros de las Fuerzas Armadas tienen una vocación de servir "que no he visto en otro sitio": "Sirven aún en detrimento de salir ellos perjudicados"

La capitán Laura Romero de Ávila.
UME

La capitán Laura Romero de Ávila ingresó en las Fuerzas Armadas en 2019 y un año después fue destinada a la Academia de Caballería, en Valladolid. En 2022 recaló en la Unidad Militar de Emergencias (UME), en donde actualmente presta sus servicios.

Como hitos, ha participado en la operación Balmis durante el COVID y en la operación Valencia durante la DANA. Este último, según sus propias palabras, siendo el caso más drástico que ha podido analizar en su carrera profesional.

La militar tiene un máster en Psicología del Deporte y es psicóloga especialista en emergencias. Además, imparte clases desde hace dos años en el Máster en Intervención Psicológica en Situaciones de Crisis, Emergencias y Catástrofes de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).

Pregunta: ¿Se les exige una mayor resistencia mental a los militares? Si así lo cree, ¿cuál es el coste emocional de ello?

Respuesta: Creo que exigir, quizás, no es la palabra, pero es verdad que un militar tiene más probabilidades que otras personas de exponerse a ciertas situaciones críticas que al final suponen un gran impacto.

P: ¿La exposición de un militar a escenarios de alta tensión pueden provocar un mayor deterioro psicológico comparado con un civil?

R: Más que hablar de militares por un lado y de civiles por otro lado, al final todos son personas. Es cierto que hay personas que tienen mayor o menor predisposición innata a sufrir ciertas patologías mentales.

Por otra parte, hay personas que han vivido más situaciones de alto impacto emocional o situaciones límites que han puesto más en juego sus recursos psicológicos.

P: Y en el caso de un militar que haya sufrido un evento traumático, ¿cómo se trata en el departamento de Psicología de la UME?

R: El equipo de Psicología interviene antes de las emergencias, muchas veces durante y también después de las mismas. Hacemos un trabajo previo de preparación psicológica que pretende dar todas las herramientas posibles para que esas situaciones se afronten de la mejor manera posible.

Luego, si durante las emergencias se detecta que alguien necesita asesoramiento psicológico puntual, se le brinda. También después de haberse expuesto a ese tipo de situaciones se suelen hacer intervenciones grupales o individuales, en función de la necesidad, para detectar si hay algún deterioro a nivel psicológico. En ese caso se interviene para restituir la salud mental lo antes posible.

P: ¿Y estas intervenciones suelen ser a petición propia de los militares o es únicamente debido a la detección del equipo psicológico?

R: Es debido a ambas. Muchas veces viene el propio interesado porque necesita ayuda y otras porque vemos conveniente intervenir tras observar trabajar a los equipos.

P: ¿Cuál ha sido el caso más drástico que ha podido analizar?

R: Lo viví en la DANA. Había parte de una sección que trabajaba sacando cuerpos de un garaje y entonces tuve que atender a una mujer mientras el equipo de intervinientes de la UME sacaba a su marido y a su hija entre los fallecidos en ese garaje. Estuve todo el proceso con ella; desde que encontraron los cuerpos, los sacaron, vino la Policía Forense para su levantamiento hasta comunicarle que se trataba de su marido y de su hija. Fue muy doloroso.

P: ¿Fue solo durante la DANA o es algo común que la unidad psicológica de la UME también ofrezca ayuda a civiles?

R: Nosotros principalmente estamos para servir de apoyo a los intervinientes, a los militares. Pero es verdad que en una situación de emergencia, si hace falta y es necesario intervenir con población civil, lo hacemos.

P: ¿Y cuál es el caso que le ha parecido más esperanzador?

R: El ver trabajar a los militares en equipo. Por ejemplo, cuando les vi en Catarroja y Paiporta, pienso que gracias al apoyo mutuo y al compañerismo superan los momentos más difíciles.

P: ¿Cómo sería la UME sin psicólogos? ¿Cómo de necesaria es la labor que desarrollan para el funcionamiento de un enorme equipo militar?

R: Creo que esta pregunta deberían responderla aquellos que reciben el apoyo, la asistencia y el asesoramiento por parte del equipo de Psicología. Pero es verdad que lo que me ha dicho el personal de la UME, en numerosas ocasiones, es que es fundamental saber que estamos ahí para ellos y que no están solos.

P: Si ha trabajado como psicóloga en otro campo que no sea el militar, ¿qué diferencias existen entre tratar a un paciente civil y uno militar?

R: Sí, he trabajado con personal civil y militar. Es verdad que hay ciertas características que están presentes en la mayoría de los militares. Por ejemplo, tienen una vocación de servir que no he visto en otro sitio; sirven aún en detrimento de salir ellos perjudicados. También son muy proactivos con un locus de control interno muy desarrollado y tienen una gran integridad. La verdad es que a mí me encanta trabajar con este tipo de población. No sé si soy lo bastante objetiva, pero están hechos de otra pasta.

P: ¿Qué es el locus de control interno?

R: Eso es cuando una persona no se ve expuesta a las circunstancias de fuera, sino que el foco de control nace de ella. No responsabiliza al entorno o a los demás de las acciones que le sucede. Es decir, tiene un papel activo en todo lo que le rodea.

P: ¿Cree que la población civil está concienciada sobre la salud mental de los militares?

R: No lo sé, no tengo una perspectiva lo bastante amplia de qué es lo que opina en general la población civil al respecto.

Sobre lo que sí puedo informar es de que en las Fuerzas Armadas se debe pasar un reconocimiento psicológico en el que se descarten trastornos mentales. Además, en la UME, dadas las características de esta unidad, anualmente se evalúa psicológicamente a todo el personal para asegurar que tiene la aptitud necesaria para el desarrollo de sus funciones. En caso de que se vea comprometida su salud mental, trabajamos en restituirla lo antes posible para que puedan desarrollar sus funciones.

P: En la Base Aérea de Torrejón, donde está el Cuartel General de la UME, existe un Polígono de Catástrofes. ¿Qué labores desarrollan ahí los militares? ¿Es necesaria la intervención de un psicólogo para prepararles cuando entran en ese recinto?

R: El Polígono de Catástrofes se utiliza para hacer ejercicios o simulacros y tiene una temática distinta en función de lo que se pretenda entrenar o del objetivo que se persiga. Los psicólogos hemos intervenido cuando esos ejercicios tienen directamente que ver con el desarrollo de herramientas de afrontamiento ante situaciones estresantes.

P: ¿Y qué se hace en este tipo de preparaciones desde un punto de vista psicológico?

R: Es que hay muchos tipos de ejercicios. No es lo mismo un curso que implique la evacuación de una víctima que un ejercicio donde se ponga a los intervinientes en situaciones altamente estresantes.