El volcán Etna, el más activo de Europa, ha vuelto a despertar con una violencia inesperada. Una masiva columna de ceniza se elevó esta mañana desde su cráter sudeste, obligando a cientos de turistas a huir despavoridos del lugar mientras una avalancha piroclástica descendía a gran velocidad por sus laderas.
La escena, captada en directo por una de las cámaras de vigilancia del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), muestra el momento exacto en el que el cielo se oscurece y los visitantes, atrapados por la sorpresa, corren para salvar sus vidas. La erupción del Etna, que comenzó con temblores volcánicos durante la madrugada, ha sido clasificada como de alta intensidad y se encuentra actualmente bajo vigilancia continua por parte de los expertos.
El Etna lanza una nube piroclástica y desata el caos
Según el INGV, la actividad volcánica del Etna se ha intensificado notablemente desde la noche anterior, con explosiones tipo estromboliano de creciente fuerza. Esta mañana, se ha registrado un flujo piroclástico —una mezcla letal de gases calientes, cenizas y fragmentos de roca— probablemente causado por el colapso de material en el flanco norte del cráter sudeste.
La nube de ceniza del Etna, cargada de vapor de agua y dióxido de azufre, se ha desplazado en dirección suroeste, generando un breve aviso rojo para la aviación, que posteriormente fue rebajado a nivel naranja por el Centro Asesor de Cenizas Volcánicas de Toulouse.

La repentina violencia del Etna ha tomado por sorpresa a numerosos turistas que recorrían sus senderos al amanecer. La cámara de seguridad en Piano Vetore captó cómo la nube piroclástica se formaba en cuestión de segundos, cubriendo el paisaje con una densa bruma gris. Muchos visitantes tuvieron que correr entre gritos de pánico mientras la ceniza comenzaba a caer sobre la zona.
Aunque por el momento no se han registrado víctimas ni daños personales, la amenaza del Etna sigue presente. La actividad sísmica oscila a unos 2,8 kilómetros de profundidad bajo el cráter.
Una amenaza constante para Sicilia
Ubicado en la costa oriental de Sicilia, el Etna es uno de los volcanes más monitoreados del planeta. Esto se debe a su intensa actividad y proximidad a centros urbanos. Solo el verano pasado, el volcán obligó al cierre parcial del aeropuerto de Catania, desviando vuelos a Palermo y Comiso por la falta de visibilidad causada por cenizas en suspensión.
Los expertos recuerdan que el Etna ha estado en un ciclo particularmente activo durante los últimos cinco años, con frecuentes expulsiones de lava y episodios de caída de ceniza sobre localidades cercanas. La reciente erupción se suma a una serie de explosiones registradas a lo largo del mes de mayo.