El lunes 28 de abril de 2025 marcó un antes y un después. A las 12:33 de la mañana, sin previo aviso, se produjo un colapso eléctrico que dejó a oscuras a España, Portugal y el sur de Francia durante más de diez horas. Lo que comenzó como un fallo puntual acabó convirtiéndose en el mayor apagón de la historia reciente del país. Hospitales operando a contrarreloj con generadores, ascensores bloqueados, trenes paralizados, supermercados colapsados, redes móviles caídas… el caos fue absoluto.
Las imágenes de ciudadanos atrapados, compras compulsivas de alimentos básicos y llamadas de emergencia sin respuesta llenaron los telediarios durante horas. Y lo peor de todo es que ahora que ha pasado más de una semana, el Gobierno no ha ofrecido aún una explicación clara. Mientras tanto, Red Eléctrica Española ha descartado un ciberataque, y los expertos apuntan a una peligrosa combinación: menos energía nuclear, más peso renovable y una infraestructura no preparada para picos de inestabilidad. Pero lo más inquietante no es lo que pasó, sino lo que podría volver a pasar. Y aquí entra en juego una nueva protagonista: la inteligencia artificial.

¿Puede la IA anticipar el próximo apagón?
Aunque suene a ciencia ficción, algunos modelos de IA ya están siendo entrenados para detectar fallos sistémicos en redes eléctricas, anticipar crisis y proponer medidas preventivas. ¿Y si esta tecnología pudiera decirnos con antelación cuándo se producirá el próximo gran apagón?. La pregunta se le formuló directamente a un modelo avanzado de IA: ¿cuándo será el próximo apagón en España? Su respuesta es tan sorprendente como inquietante por lo cercana de la fecha: el viernes, 25 de julio de 2025.
Este dato no proviene de una filtración ni de una fuente gubernamental. La IA se basa en modelos estadísticos, patrones meteorológicos, comportamientos de consumo eléctrico y la evaluación de riesgos pasados. Aunque no se trata de una predicción oficial, ni existe garantía de que ocurra en esa fecha, el solo hecho de que una IA pueda establecer una probabilidad razonada ha disparado las alertas.
¿Por qué el 25 de julio puede haber otro apagón según la IA?
La elección del 25 de julio no parece aleatoria. Se trata de una jornada de alto consumo eléctrico, en plena ola de calor veraniega, coincidiendo además con un puente festivo en varias comunidades. La presión sobre la red aumenta de forma considerable en esos días, y si el sistema sigue presentando las debilidades que se pusieron de manifiesto en abril, el colapso podría repetirse. A esto se suma otro factor simbólico pero inquietante: en esa fecha también habrá luna nueva, lo que deja al país completamente a oscuras si vuelve a fallar el sistema eléctrico. Un detalle que, aunque pueda parecer nimio, contribuye al clima de incertidumbre.

Como protegerse ante otro apagón
Por eso mismo, para estar protegidos en caso de que de verdad se produzca un nuevo apagón, cada vez más expertos recomiendan a la población contar con un kit básico de emergencia ante posibles nuevos apagones. Estos son algunos de los elementos clave:
-
Iluminación segura: linternas LED, velas, mecheros o cerillas resistentes al agua.
-
Agua potable: al menos tres litros por persona y día, con sistemas de filtrado o pastillas potabilizadoras como respaldo.
-
Alimentos no perecederos: conservas, productos deshidratados y barritas energéticas. Además de un abrelatas manual.
-
Botiquín de primeros auxilios: medicinas básicas y cualquier tratamiento crónico necesario.
-
Radio portátil: preferiblemente a pilas o de dinamo, para seguir conectado si fallan las redes.
-
Mantas térmicas y ropa de abrigo: incluso en verano, las noches pueden ser frías sin calefacción ni ventilación.