La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado un nuevo frente contra las grandes empresas tecnológicas que operan en España. Durante su comparecencia en la Comisión de Trabajo del Congreso de los Diputados, la líder de Sumar confirmó la puesta en marcha de una inspección laboral masiva para controlar el uso de algoritmos y sistemas de seguimiento en compañías como Uber, Cabify o Amazon.
“Vigilaremos el control algorítmico que estas empresas ejercen sobre sus trabajadores. Se llamen como se llamen, lo que no vamos a permitir es un modelo laboral del siglo XIX con pulseras de vigilancia y jornadas de 120 horas”, advirtió Yolanda Díaz. Una intervención que provocó un fuerte revuelo político y mediático. La ministra aseguró que la Inspección de Trabajo actuará “con contundencia” y que el Gobierno enviará un mensaje claro: “En España, los derechos laborales se respetan y se cumplen”.
Inspecciones a Amazon, Uber y otras tecnológicas
El anuncio de Yolanda Díaz llega pocos días después de que Amazon comunicara un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a unos 1.200 trabajadores en Madrid y Barcelona. El Ministerio de Trabajo considera que la situación de los empleados de estas plataformas —y la creciente automatización del control laboral— exige una respuesta inmediata.

Fuentes del equipo de Yolanda Díaz explican que el objetivo de esta inspección es “garantizar la transparencia y el cumplimiento de la ley en el uso de algoritmos que afectan directamente a las condiciones de trabajo”. La iniciativa sigue la línea de otras medidas impulsadas por el Ministerio, como la Ley Rider, que obligó a las plataformas de reparto a contratar a los repartidores como asalariados.
La ministra advirtió de que no permitirá que “modelos laborales como el de Amazon” se conviertan en la norma y aseguró que su departamento actuará “en defensa de la dignidad de los trabajadores frente a los abusos tecnológicos”. Según adelantó, las primeras inspecciones comenzarán en noviembre y se extenderán durante todo 2025.
Yolanda Díaz prepara una nueva subida del SMI
Además de su ofensiva contra las tecnológicas, Yolanda Díaz confirmó su intención de impulsar una nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que aspira a elevar hasta los 1.500 euros mensuales en 12 pagas. Su equipo considera que esta cifra sería el “legado social” de la ministra en la legislatura actual, especialmente tras el fracaso de la reforma de la jornada laboral, que fue bloqueada por Junts en el Congreso.
Actualmente, el SMI se sitúa en 1.184 euros en 14 pagas, equivalentes a unos 1.381 euros mensuales en 12. Con el nuevo incremento, Yolanda Díaz buscaría reforzar la imagen de Sumar como el ala más social del Ejecutivo y contrarrestar la sensación de parálisis legislativa que se percibe en el Gobierno.

Desde el Ministerio insisten en que el aumento del SMI es “una medida justa, viable y necesaria” para reducir la desigualdad salarial y mejorar la situación de los trabajadores precarios. Sin embargo, las patronales advierten de que una subida tan pronunciada podría tener efectos negativos sobre la contratación y la productividad.
El informe Foessa y la presión social sobre el Gobierno
El impulso de Yolanda Díaz al SMI coincide con la publicación del informe Foessa (Cáritas), que ha sacudido al Ejecutivo al revelar una fractura social creciente en España. Según el estudio, 4,3 millones de personas viven en exclusión severa y más de la mitad de los hogares en alquiler están al borde de la pobreza. En total, 11 millones de trabajadores sufren precariedad laboral, un dato que contrasta con el optimismo del Gobierno sobre la evolución del empleo.
El informe apunta directamente a la brecha entre los buenos indicadores macroeconómicos y la realidad de millones de familias. En ese contexto, Yolanda Díaz intenta colocar la agenda social en el centro del debate y enviar un mensaje político claro: que Sumar sigue siendo el referente progresista del Gobierno.


