El mercado inmobiliario vuelve a moverse con intensidad y las cifras lo confirman. Las hipotecas en España han alcanzado máximos que no se veían desde 2007. El número de préstamos para la compra de vivienda y el importe medio por operación se han disparado en los últimos meses, impulsados por la bajada de tipos y la caída del Euríbor.
Según los datos publicados por el INE, en junio se constituyeron 41.834 nuevas hipotecas sobre vivienda. Un 31% más que en el mismo mes del año anterior. El importe medio subió un 15,5%, hasta situarse en 168.363 euros, el nivel más alto en casi dos décadas.
Hipotecas en España: un semestre de récord
Si se suman todas las hipotecas de los primeros seis meses de 2025, el balance es claro: 243.257 préstamos inscritos, un 24% más que en el mismo periodo del año anterior. Se trata del mejor arranque desde 2011 y consolida la tendencia alcista de las hipotecas en España.
El repunte de junio no fue un hecho aislado. En mayo el crecimiento interanual alcanzó el 54% y en abril, el 44%. Tres meses consecutivos que apuntan a una clara recuperación de la financiación hipotecaria en un contexto marcado por el descenso del Euríbor y el cambio de política monetaria del BCE.
En total, los bancos prestaron en junio 7.043 millones de euros, el volumen más alto desde 2008, salvo el mes excepcional de octubre de 2024. Sin embargo, todavía lejos de los meses de 2007, cuando se llegaron a superar los 17.000 millones.
Aun así, lo más llamativo es la cifra del importe medio: 168.363 euros. En términos históricos, solo febrero de 2020 había registrado una media superior. Pero aquel mes fue considerado atípico. De este modo, el dato de junio devuelve a las hipotecas en España a niveles de 2007, en pleno auge previo a la crisis financiera.
Tipos de interés: más bajos y con más hipotecas fijas
Uno de los factores clave detrás del repunte de las hipotecas en España es la evolución de los tipos de interés. El INE calcula que el tipo medio de las nuevas hipotecas sobre viviendas fue del 2,99% en junio, con un plazo de amortización de 25 años.

Cada vez son más los compradores que se decantan por hipotecas a tipo fijo. En junio, el 72% de los nuevos contratos se firmó a interés fijo, frente al 28% que optó por el variable. La diferencia de coste es mínima: 2,98% frente a 3%. Esta preferencia refleja la búsqueda de seguridad de los hogares, que ven en el tipo fijo una forma de blindarse ante posibles repuntes del Euríbor.
La escasez de viviendas nuevas sigue siendo uno de los grandes problemas. El Banco de España calcula que existe un déficit de 600.000 viviendas, lo que agrava la presión sobre los precios. En este contexto, las hipotecas en España actúan como combustible que intensifica el encarecimiento de la vivienda.
La pescadilla que se muerde la cola
El escenario actual de las hipotecas en España refleja un círculo difícil de romper. Los tipos más bajos impulsan el crédito, el crédito alimenta la demanda y la demanda eleva los precios. A su vez, precios más altos obligan a financiar importes mayores, lo que incrementa el endeudamiento de los hogares.
La banca ha flexibilizado sus condiciones. Eso facilita el acceso, pero también genera vulnerabilidades a largo plazo.
Todo apunta a que las hipotecas en España seguirán creciendo en los próximos meses, apoyadas en un Euríbor más bajo y en la mejora del acceso al crédito. El gran interrogante es si esta dinámica generará una burbuja similar a la de 2007 o si la regulación actual será suficiente para evitar los excesos del pasado.
Lo que está claro es que el mercado inmobiliario se encuentra en plena efervescencia. Las cifras de hipotecas, los precios en máximos y la fuerte demanda anticipan un otoño caliente en el sector.