A falta de 10 días para el cierre del periodo de aceptación, el Consejo de Administración del Banco Sabadell ha expresado su negativa a la nueva oferta del BBVA, de una acción de la entidad vasca por cada 4,8376 acciones del vallesano. El presidente de Sabadell, Josep Oliu, ha defendido que la propuesta “tiene un atractivo nulo, sigue infravalorando al banco y destruye valor para sus inversores”. E identifica que “está un 26% por debajo del valor fundamental de la entidad“. Oliu estima ese importe, como consecuencia de las expectativas de creación de resultados y distribución de beneficios de la entidad financiera.
En paralelo, el órgano del banco catalán ha elevado hasta 1.450 millones de euros el objetivo de remuneración al accionista con cargo al ejercicio 2025, frente a los 1.300 millones inicialmente previstos. La decisión, comunicada este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), responde a “la buena evolución del negocio, los resultados y la generación de capital”, según explicó Sabadell. El banco asegura que la actualización busca “ofrecer a los inversores la información más precisa posible” en pleno proceso de Oferta Pública de Adquisición (OPA) lanzado por BBVA sobre el capital del vallesano.
640 millones de euros
Pero hay quienes ya tienen la decisión tomada. David Martínez, principal accionista individual del banco catalán, ha anunciado que acudirá al canje de BBVA. “He decidido participar en la oferta presentada por BBVA porque considero que la futura consolidación en España de ambas instituciones dará lugar a una entidad aún más competitiva”, señaló el inversor. En este sentido, Martínez, permutará su participación del 3,86% del total del capital social de Sabadell, valorada en algo más de 640 millones de euros, por acciones del banco vasco, según informó la entidad a la CNMV. La decisión ha despertado críticas entre la dirección del Sabadell. El consejero delegado, César González-Bueno, ha señalado que “no veo toda la lógica de su decisión. Pero, por supuesto, la respetamos”.
Asimismo, el vallesano ha adelantado información sobre unos resultados muy sólidos para contener la fuga de accionistas. Sabadell anuncia que cerró hasta el octavo mes del presente año con unos rendimientos que superan sus propias previsiones. El beneficio neto atribuido alcanzó los 1.262 millones de euros, un 11% más que en el mismo periodo del año anterior, lo que sitúa la rentabilidad sobre fondos propios tangibles (RoTE) en el 15,1%. En el plano comercial, la entidad también muestra un avance sólido. El crédito vivo creció un 6,4% -excluyendo a su filial británica TSB-, mientras que los recursos totales de clientes se incrementaron un 7,3% interanual.

Una acción de BBVA por cada 4,8376 del Sabadell
La nueva propuesta de una acción de BBVA por cada 4,8376 del Sabadell mejora en un 10% la anterior. La alternativa elimina al mismo tiempo la retribución en efectivo del intento de compra previo, lo que evita la carga fiscal al acudir al canje. No obstante, ese coste no desaparece íntegramente. Solo se cumplirá si el BBVA logra hacerse con al menos el 50% de los derechos de voto del vallesano, según estipula la ley.
Los accionistas disponen ahora hasta el próximo viernes 10 de octubre para decidir si aceptar o no la oferta del banco vasco. Pese a la negativa de Sabadell, el presidente de BBVA, Carlos Torres, ya se mostró, en una entrevista el pasado viernes con la Agencia Efe, “absolutamente convencido” de que la OPA logrará superar el 50% del capital. No obstante, desde Sabadell anticipan “una aceptación inferior. Lo que perjudicaría a los accionistas que acudan a la oferta actual al tener, previsiblemente, un precio más bajo que la segunda OPA“, según González-Bueno.
Un dividendo histórico
El rechazo a la nueva oferta presentada por el BBVA, se produce un día después del último intento del vasco por atraer a los accionistas indecisos del vallesano. En la jornada de ayer, el banco presidido por Carlos Torres, puso sobre la mesa un nuevo as: un dividendo histórico que se abonará el 7 de noviembre. Lo que permitirá a los accionistas del banco catalán que hayan canjeado sus acciones acogerse al cobro. La retribución, a cuenta del ejercicio 2025, alcanza los 0,32 euros brutos por acción. Y eleva el pago al accionista en un 10,3% respecto al año anterior, cuando se situó en 29 céntimos. A este desembolso, se suma un segundo ingreso complementario que en 2024 fue de 41 céntimos.
Sin embargo, el consejero delegado de Sabadell ha defendido que en proporción con el vallesano, el dividendo entregado por el BBVA en 2024, de 70 céntimos, es “un 41% inferior al aportado por Sabadell”. Al dividir la cantidad distribuida entre el canje propuesto por el vasco -4,8376- la retribución del banco presidido por Torres se reduce a 0,145 euros. Frente a los 0,204 euros repartidos por el catalán ese mismo año.
En Bolsa
La sesión, que pretendía informar sobre la opinión del Sabadell acerca de la nueva mejora de la OPA, se inició una vez concluida la jornada bursátil. Las acciones de Sabadell y BBVA acumulan días fluctuando al unísono. Al cierre de la sesión de hoy, la acción del vallesano se ha elevado levemente hasta los 3,30 euros por título, un 0,20% de subida diaria. Por su parte, el valor del banco opante creció con mayor holgura hasta alcanzar un 0,60% de revalorización. BBVA sitúa, así, el precio de su acción en los 16,34 euros.
En este pulso corporativo, el rechazo del Sabadell añade un nuevo capítulo a una retahíla de ofertas y dividendos récord para inversores que ambos han anunciado, a bombo y platillo, para convencer al accionista en su favor. A falta de diez días para el desenlace, los titulares se enfrentan a la decisión final. Aunque algunos como Martínez ya han tomado cartas en el asunto, otros muchos tendrán que elegir entre la continuidad de un banco independiente. O sumarse a una de las mayores integraciones del sistema financiero español de las últimas décadas.