En 2026, Tennessee planea llevar a cabo una ejecución histórica, la de Christa Gail Pike, la única mujer actualmente en el corredor de la muerte del estado. Si se concreta, será la primera ejecución de una mujer en Tennessee en más de dos siglos y la decimonovena de una mujer en Estados Unidos desde que se reinstauró la pena capital en 1976.
Pike, hoy de 49 años, fue condenada a muerte en 1996 por el brutal asesinato de su compañera Colleen Slemmer, ocurrido en enero de 1995, cuando Pike tenía solo 18 años. La víctima tenía 19.
Un crimen que conmocionó a Knoxville
Christa Pike y Colleen Slemmer eran estudiantes del Knoxville Job Corps, un programa de formación laboral para jóvenes. Según los fiscales, Pike comenzó a salir con un chico de 17 años dentro del programa y pronto empezó a temer que Slemmer quisiera “robarle” al novio. Movida por los celos, junto a su pareja Tadaryl Shipp y a su amiga Shadolla Peterson, atrajo a Slemmer a un área boscosa cercana al campus de la Universidad de Tennessee el 12 de enero de 1995.
Durante aproximadamente una hora, Pike lideró una agresión espeluznante. De acuerdo con documentos judiciales, la joven utilizó un cúter para cortarle la garganta a Slemmer en seis ocasiones, la golpeó con un trozo de asfalto y le infligió múltiples heridas con distintos objetos. También le talló un pentagrama en el pecho y la frente. Un trabajador de mantenimiento que encontró el cuerpo al día siguiente “testificó que el cuerpo estaba tan brutalmente golpeado que al principio lo confundió con el cadáver de un animal”.
El crimen no solo estremeció por su violencia, sino también por la actitud posterior de Pike. Según testigos, al regresar al centro, se jactó del asesinato y mostró a otros estudiantes un fragmento del cráneo de Slemmer que había guardado como “trofeo”.
Pike fue arrestada poco después y, en 1996, a los 20 años, un jurado la declaró culpable de asesinato en primer grado. Recibió la pena de muerte, convirtiéndose en la persona más joven en el corredor de la muerte en Tennessee en ese momento. Shipp, por ser menor de edad en el momento del crimen, no pudo ser condenado a muerte; fue sentenciado a cadena perpetua y podrá solicitar libertad condicional en noviembre de este año.
Peterson, por su parte, se declaró culpable de ser cómplice y testificó contra Pike. A cambio, recibió una sentencia de seis años de libertad condicional.
Un caso excepcional en la historia de la pena de muerte
La ejecución de mujeres en Estados Unidos es extremadamente inusual. Según el Death Penalty Information Center, desde 1976 solo 18 mujeres han sido ejecutadas, frente a más de 1.600 hombres. Esto representa apenas el 1 % de todas las ejecuciones modernas.
En Tennessee, la última vez que una mujer fue ejecutada fue en 1820. Investigaciones históricas independientes señalan que únicamente tres mujeres —todas negras— fueron ejecutadas entre 1807 y 1819, mediante la horca. La ejecución de Pike marcaría, por tanto, un precedente sin igual en la historia reciente del estado.
En las décadas posteriores a su condena, Pike y sus abogados han intentado revertir la sentencia en múltiples ocasiones. Han presentado apelaciones y solicitudes de clemencia argumentando su juventud, problemas mentales y una infancia marcada por abusos.
En una carta enviada al diario The Tennessean, Pike escribió:
“Piensa en el peor error que cometiste como adolescente imprudente. Bueno, el mío resultó ser enorme, inolvidable y arruinó incontables vidas… Yo era una niña de 18 años con problemas mentales. Me tomó muchos años siquiera darme cuenta de la gravedad de lo que había hecho. Aun más, aceptar cuántas vidas afecté. Le quité la vida a la hija, hermana y amiga de alguien. Me enferma pensar que alguien tan amorosa y compasiva como yo haya tenido la capacidad de cometer semejante crimen”.
Su equipo legal también emitió un comunicado a USA Today en el que señalaron que “la infancia de Christa estuvo marcada por años de abuso físico y sexual y negligencia… Con tiempo y tratamiento para los trastornos bipolar y de estrés postraumático, que no fueron diagnosticados hasta años después, Christa se ha convertido en una mujer reflexiva con profundo remordimiento por su crimen”.
Los abogados argumentan que, de haber sido juzgada hoy, probablemente no habría recibido la pena capital debido a su corta edad y sus condiciones mentales en el momento del crimen.
Durante 27 años, Pike fue la única mujer en el corredor de la muerte de Tennessee, en condiciones que sus defensores compararon con el aislamiento prolongado. En 2024, un acuerdo judicial le permitió interactuar más con otras reclusas en actividades como comidas, clases y servicios religiosos.
Fecha de ejecución y métodos
El 1 de octubre de 2025, la Corte Suprema de Tennessee fijó oficialmente la fecha de ejecución para el 30 de septiembre de 2026. De concretarse, Pike sería ejecutada en la Riverbend Maximum Security Institution, en Nashville.
En Tennessee, el método por defecto es la inyección letal, aunque los reclusos condenados por delitos cometidos antes de 1999 pueden optar por la silla eléctrica. Entre 2018 y 2019, cinco presos eligieron la electrocución debido a fallos reportados en las ejecuciones con drogas letales.
Mientras algunos sectores abogan por la conmutación de la pena, la familia de Colleen Slemmer mantiene una postura firme a favor de la ejecución. En 2021, la madre de la víctima, May Martinez, declaró a WBIR-TV: “Solo quiero que Christa desaparezca para poder terminar con esto, liberar a mi hija, para que finalmente pueda descansar”.




