Octubre será un mes inolvidable para los amantes de la astronomía. Dos cometas brillantes, el C/2025 R2 (SWAN) y el C/2025 A6 (Lemmon), pasarán muy cerca de la Tierra en una coincidencia cósmica que no volverá a repetirse en muchos siglos. El cometa SWAN alcanzará su máxima aproximación el 20 de octubre, situándose a unos 38,6 millones de kilómetros, mientras que Lemmon lo hará el 21 de octubre, acercándose hasta unos 88,5 millones de kilómetros.
Lo más fascinante es que ambos cometas brillantes podrán verse a simple vista o con prismáticos, siempre que el cielo esté despejado y haya poca contaminación lumínica. Se trata de un espectáculo que convertirá las noches del 20 y 21 de octubre en una cita imprescindible para quienes disfrutan mirando las estrellas.
El origen de los cometas brillantes: viajeros desde la Nube de Oort
Los dos cometas brillantes tienen un origen común en los confines del sistema solar. Proceden de la Nube de Oort, una gigantesca reserva de cuerpos helados situada a miles de millones de kilómetros del Sol. Desde allí, el cometa SWAN y el cometa Lemmon iniciaron un viaje que los ha traído hasta nuestro vecindario planetario.

Ambos son no periódicos. Eso significa que tardarán cientos o incluso miles de años en regresar. Los astrónomos calculan que el cometa Lemmon no volverá a verse hasta dentro de 1.300 años, mientras que el cometa SWAN necesitará entre 650 y 700 años para completar su órbita alrededor del Sol. Esta rareza convierte su paso por la Tierra en una oportunidad que las generaciones actuales no volverán a presenciar.
Cuándo y cómo ver los cometas SWAN y Lemmon
El cometa SWAN (C/2025 R2) será el primero de los dos cometas brillantes en acercarse. Alcanzará su punto más cercano el 20 de octubre, y será visible principalmente al anochecer desde el hemisferio sur. Conforme avancen los días, su brillo aumentará y podrá observarse también desde latitudes más septentrionales.
Por su parte, el cometa Lemmon (C/2025 A6) llegará a su máxima aproximación el 21 de octubre y será visible justo antes del amanecer, especialmente desde el hemisferio norte. La NASA estima que podría alcanzar una magnitud de +3, comparable al brillo de algunas de las estrellas más reconocibles del firmamento.

Ambos cometas brillantes ofrecerán su mejor cara durante la fase de Luna Nueva, que también tendrá lugar alrededor del 21 de octubre. Gracias a la escasa interferencia de la luz lunar, las condiciones de observación serán excepcionales para captar incluso los detalles más sutiles de su resplandor.