El próximo 2 de julio arranca en Suiza la Eurocopa 2025. Un torneo en el que España se presenta como vigente campeona mundial y como uno de los grandes rivales a batir. Al frente del combinado español estará, una vez más, Alexia Putellas. La capitana de la Selección Española que encarna la ambición, el talento y la experiencia de una generación que quiere seguir haciendo historia.
España aterriza con un grupo consolidado, dirigido por Montse Tomé, y con una hoja de ruta clara: demostrar que la era de la seleccionadora puede perdurar en el tiempo. Ellas parten como favoritas a la cita europea y el grupo cuenta con una gran “fortaleza mental”, tal y como destacó Tomé.
El regreso más esperado
A sus 31 años, Putellas encara esta Eurocopa como una oportunidad de redención y culminación. La centrocampista del Barça, doble Balón de Oro y máxima referente, se perdió la pasada edición por su lesión de rodilla. Y ahora regresa, tanto física como mentalmente, a una Eurocopa para liderar un vestuario que combina el talento joven y la veteranía.
El crujido que cambió todo
El 5 de julio de 2022, en un entrenamiento previo a la Eurocopa de Inglaterra, Alexia sintió cómo su rodilla izquierda se partía. “Oí el sonido de una rama al romperse”, confesó en una entrevista reciente a The Guardian. Aquel chasquido significó meses de quirófano, rehabilitación y noches sin dormir.
La lesión del ligamento cruzado anterior y el posterior problema de menisco pusieron a prueba su carácter. Alejada del terreno de juego, aprendió a reconstruirse: primero de rodilla, luego de cabeza. A día de hoy demuestra que ha vuelto y que ha regresado más fuerte.
Alexia, la jugadora récord
La de Mollet de Vallés es, hoy por hoy, la futbolista con más partidos disputados con la Selección Española: 131 internacionalidades y 34 goles. Desde que debutó en 2013, ha conseguido todo salvo una Eurocopa con la absoluta, la espinita que quiere sacarse este verano.

En la última temporada con el FC Barcelona ha firmado 22 goles y 16 asistencias en 39 partidos, demostrando que está a su mejor nivel tras su lesión y cerrando la temporada con el triplete español. “Ahora soy mejor Alexia”, resumió en una entrevista reciente, sin dramatismos, con la convicción de quien se conoce.
El brazalete pesa, pero impulsa
Montse Tomé ha apostado por un liderazgo que nunca falla: Alexia comparte capitanía con Irene Paredes, Olga Carmona, Patri Guijarro y Aitana Bonmatí. Pero nadie duda de que es Putellas quien ejerce de capitana simbólica dentro y fuera del césped.
No solo manda en la presión alta y en la pausa con balón: también ha levantado la voz en los momentos más complicados de la Selección Española. Su figura encarna una generación que quiere títulos y además dejar un legado.
Un grupo ambicioso con un reto claro
España aterriza en Suiza tras llegar a la final four de la Nations League. En la fase de grupos se medirá a Portugal, Bélgica e Italia: un cuadro asequible por el que también se confirma su favoritismo. Fuera de probabilidades y cálculos, España como equipo es favorita y si se le añade el estado anímico de cada una de las jugadoras, aspiran al título con más seguridad que otras selecciones.
“La clave es ir partido a partido. Nos equivocamos si solo pensamos en ganar la final”, advirtió Alexia antes de viajar a Suiza. Existe una prudencia de puertas para afuera, pero hay una ambición intacta por dentro.
Una capitana entre dos generaciones
Alexia, aunque sea una de las veteranas, ejerce de puente con la nueva hornada. Aitana Bonmatí o Patri Guijarro han sido herederas también de un estilo que Alexia representa como nadie: juego de combinación, presión alta y liderazgo competitivo. Tres vertientes aprendidas en La Masía.

Su rol como capitana no solo exige goles o asistencias, sino templar la presión de ser favoritas. “Tenemos que disfrutar, competir y demostrar por qué estamos aquí”, afirmó tras el último entrenamiento en Las Rozas.
El único título que falta
España nunca ha ganado una Eurocopa femenina. Ni cuando tenía a Vero Boquete como estrella, ni en los inicios de esta generación dorada. El título mundial de 2023 y su primera Nations League confirman que la Roja está lista para acabar con este vacío. Si lo logra, la imagen será la misma que tantas veces ha soñado la afición: Alexia Putellas, con el brazalete en el brazo, levantando un trofeo que falta en su palmarés y en el de todo un país.