Ola de reacciones tras la cancelación de la Vuelta: “¡Una vergüenza para España!”

La suspensión de la última etapa de la Vuelta a España en Madrid, tras una multitudinaria protesta propalestina que bloqueó el recorrido ocupa titulares en la prensa internacional

Los manifestantes propalestinos cortan el recorrido de los ciclistas en el Paseo del Prado, este domingo, durante la última etapa de la Vuelta a España.
EFE/Rodrigo Jiménez

La decisión de la organización de la Vuelta a España de cancelar la etapa final prevista por el centro de Madrid, después de que una manifestación propalestina bloqueara varios puntos del circuito y de que se produjeran momentos de tensión con cargas policiales en el entorno del Paseo del Prado, ha desencadenado un debate político y mediático de dimensión internacional. Las imágenes de corredores intentando abrirse paso mientras los agentes dispersaban a los concentrados se convirtieron en un símbolo de un cierre sin precedentes y el punto de partida para una ola de reacciones: para unos, triunfo del derecho de protesta; para otros, una derrota del deporte y de la imagen de España.

La polémica trascendió fronteras con la reacción de Israel. El ministro de Exteriores, Gideon Saar, acusó a Sánchez de incitar las protestas: “Sánchez y su gobierno: ¡una vergüenza para España!”. Según Saar, “la turba pro-palestina escuchó los mensajes incitadores y arruinaron la carrera ciclista “La Vuelta”. De esta forma, el evento deportivo que siempre ha sido un motivo de orgullo para España, fue cancelado”, y llegó a asegurar que días atrás Sánchez “lamentó no tener una bomba atómica para detener a Israel”. El propio presidente español, por su parte, había expresado su “admiración a un pueblo español que se moviliza por causas justas como Palestina”, posición que sus detractores interpretan como gasolina sobre un terreno ya inflamable.

La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, también se pronunció para criticar a Pedro Sánchez por homenajear a los “acosadores” en lugar de a los ciclistas. En un mensaje personal en Facebook, evocó su infancia y el recuerdo de su padre siguiendo el Tour de Francia, para subrayar que el ciclismo es un deporte “fascinante” en el que un hombre o una mujer se enfrentan solos a la montaña o al viento. Frederiksen ensalzó el triunfo de Jonas Vingegaard, al que definió como motivo de orgullo nacional, y lamentó que la Vuelta “ha sido destruida por manifestantes y el deporte ha sido tomado como rehén en conflictos ajenos”. La mandataria concluyó con una frase rotunda: “Mi colega español rindió homenaje ayer a los acosadores. Discrepo totalmente. En cambio, quiero rendir homenaje a los atletas y a todos los que no arruináis nada para los demás”.

MADRID, 14/09/2025.- Los manifestantes propalestinos cortan el recorrido de los ciclistas en el Paseo del Prado, este domingo, durante la última etapa de la Vuelta a España que se disputa entre las localidades madrileñas de Alalpardo y Madrid, con un recorrido 103,6 Km.- EFE/Rodrigo Jiménez

“Las protestas envuelven Madrid”

Más allá de las reacciones políticas, la dimensión internacional del suceso se reflejó de inmediato en los titulares de la prensa extranjera. Aunque casi todas coinciden en lo mismo, cada cabecera puso el acento en un aspecto distinto: unas subrayaron el caos deportivo, otras el trasfondo geopolítico y algunas se hicieron eco de la fractura social que el final abrupto de la Vuelta proyecta hacia fuera.

Los medios anglosajones titularon muy similar, con titulares breve y estrictamente informativos. La BBC tituló: “Última etapa de la Vuelta, suspendida por las protestas”, mientras CNN optó por “Suspendida la última etapa de la Vuelta a España tras las protestas pro palestinas” y The Times habló directamente de “La Vuelta a España cancelada mientras las protestas pro palestinas envuelven Madrid”. Todos ellos coincidieron en destacar la magnitud del colapso organizativo y en el hecho insólito de que una de las grandes pruebas ciclistas del calendario mundial no pudiera completar su recorrido por la presión de la calle. En ese relato, lo que prevalece es la imagen de una España incapaz de garantizar la seguridad de un evento deportivo global, con la protesta como elemento disruptivo más que como reivindicación política.
The Guardian, en cambio, llevó la historia hacia otro terreno: el debate sobre la participación de Israel en competiciones internacionales. Su titular, “El presidente español pide que se excluya a Israel de los eventos deportivos tras el abandono de la Vuelta”, destaca la posición del presidente.

El enfoque de Al Jazeera reforzó esa línea al subrayar la dimensión de la protesta. El término elegido —“masiva”— recalca el carácter multitudinario de la movilización y la sitúa directamente en el marco de solidaridad con Palestina. No lo retratan como un problema de orden público en la capital española, sino de una expresión visible unión ante la causa palestina.

La prensa francesa y alemana optó por otros registros. Le Figaro recogió en su titular tanto la indignación como la celebración, hablando de “vergüenza internacional” y de “lección al mundo entero”. En general, el medio se centra más en destacar el contraste político interno. En cambio, el Frankfurter Allgemeine Zeitung adoptó un tono sobrio y técnico, limitándose a señalar el “abandono anticipado” de la etapa, sin adjetivos ni dramatismo. Un enfoque más distante que, sin embargo, también contribuye a normalizar la idea de que la Vuelta estuvo marcada por interrupciones reiteradas.

Alrededor de un centenar de personas han protestado sin incidentes contra la guerra de Israel en Gaza este viernes, en el puente de Enrique Estevan de Salamanca.
EFE/ J.M.GARCÍA

Reacciones de la prensa israelí

Los principales diarios israelíes coincidieron en señalar el episodio como un ataque contra Israel y en responsabilizar a Pedro Sánchez de avalar con sus palabras lo sucedido.

El Jerusalem Post abrió con un titular contundente: “La Vuelta a España, cancelada tras las protestas pro palestinas”. El diario habló de manifestantes “anti-Israel” que “causaron estragos” y forzaron la cancelación, subrayando la paradoja de que, pese al caos, “un ganador fue anunciado” en la clasificación final.

El Times of Israel fue más explícito en la conexión política: “Manifestantes antiisraelíes bloquean la última etapa de la Vuelta tras recibir elogios del primer ministro español”. El titular apuntaba directamente al elogio de Sánchez hacia quienes protestaban, enmarcando así la suspensión como una consecuencia indirecta de las declaraciones del presidente. Además, remarcó que, pese al despliegue de “más de 1.500 agentes”, el evento no pudo celebrarse, y que incluso un miembro del equipo Israel Premier Tech consiguió un premio, lo que añade un matiz de resistencia frente al boicot.
Por su parte, Ynet endureció aún más el tono contra Sánchez: “El primer ministro español elogia las violentas protestas contra el equipo ciclista israelí: ‘Una causa justa’“.