Israel habría “aceptado las condiciones” para alcanzar una tregua de 60 días con Hamás, según afirmó Donald Trump en su red Truth Social. Si bien el presidente estadounidense no dio detalles sobre el posible acuerdo, la intención de la Casa Blanca es zanjar el pacto ante la inminente llegada de Benjamin Netanyahu a Washington.
Desde la oficina del primer ministro israelí no respondieron oficialmente al anuncio. “Trabajaremos con todas las partes para terminar la guerra”, insistió Trump, que añadió que los mediadores de Egipto y Qatar entregarán una “propuesta final” a Hamás próximamente. En todo caso, sobre la mesa está una nueva propuesta de tregua parcial, que dejaría la puerta abierta a retomar las hostilidades si Netanyahu lo considera necesario.
Cerrar la guerra en Gaza
Trump pretende aprovechar el impulso logrado por la tregua lograda entre Irán e Israel para finiquitar la guerra en Gaza, que se acerca ya a sus dos años de duración. “Por el bien de Oriente Medio, espero que Hamás acepte este acuerdo, porqué no podrá mejorarse, solo empeorarse”, remarcó en Truth Social.

El grupo islamista retiene todavía a 50 rehenes israelíes -20 en vida-, y su reticencia a rendirse y entregarlos da alas a la interminable campaña militar israelí en la franja, donde diariamente mueren decenas de personas por los bombardeos. Netanyahu insiste ahora en que la “prioridad es liberar a los rehenes”, aunque sus familiares le acusan de haberlos abandonado en los túneles de Hamás. Le acusan de eternizar la guerra por interés político y personal, para así postergar sus juicios por corrupción -incluidos vínculos de sus asesores con Qatar-, así como la convocatoria de elecciones.
“¡Cerrad el pacto en Gaza, devolved ya a los rehenes!”, clamó Trump. Para Netanyahu, el duro golpe militar atestado a Irán “abrió nuevas oportunidades” en la región, por lo que Israel debe aprovecharlas para “resolver la cuestión de Gaza y derrotar a Hamás. Creo que lograremos ambas misiones”.
Qué piensa la extrema derecha israelí
Desde la extrema derecha que sostiene a Netanyahu en el poder, los ministros Betsalel Smotrich e Itamar Ben Gvir ya están operando para lastrar las opciones de tregua. Einav Zangauker, madre del rehén Matan convertida en la “símbolo de los rehenes”, alertó que ante la “intención de dinamitar el acuerdo para liberar a los rehenes, recuerdo a Netanyahu sus palabras, donde afirmó que tendría apoyos políticos amplios. El pueblo entero quiere a los rehenes en casa”.

Las familias de los rehenes cargan contra la extrema derecha, a quien acusan de “haberse olvidado de lo que supone ser judíos”. Analistas políticos especulan con que Netanyahu podría buscar nuevas alianzas -con partidos de centro- en caso de un posible abandono de sus aliados ultras, que sueñan con ocupar permanentemente Gaza y construir colonias judías.
Trump insiste en terminar la guerra
Desde su toma de posesión, Trump insistió en la necesidad de terminar la guerra. A finales de enero, logró impulsar una tregua que permitió la liberación de 33 rehenes y una pausa en las hostilidades. Pero Netanyahu ordenó bombardear de nuevo, al considerar que Hamás incumplió los parámetros del acuerdo.

Aunque parece que Israel acepta los detalles del nuevo acuerdo que propone Steve Witkoff, enviado de EE UU en Oriente Medio, los principales obstáculos siguen sin resolverse. Hamás plantea una retirada total israelí de la franja, a cambio de liberar a todos los rehenes israelíes que mantiene en su poder. No obstante, Israel insiste en la rendición total de Hamás, que debería entregar sus armas y mandar a su liderazgo al exilio.
Con el fin de la guerra contra Irán, las imágenes de sufrimiento y hambruna en Gaza vuelven a centrar el foco mediático, y crece la presión para terminar definitivamente la guerra. El bloqueo durante varias semanas a la entrada de ayuda humanitaria -desde finales de marzo- encendió todas las alarmas por la dramática situación que sufre la población civil.

Desde hace semanas, los gazatíes tratan de lograr alimentos en los controvertidos centros de reparto del Gaza Humanitarian Foundation (GHF), donde testigos reportan constantes tiroteos y cientos de víctimas mortales por fuego israelí contra las aglomeraciones. Entre el debate de posible tregua, el ejército israelí sigue ejecutando su plan para controlar el 75% del territorio del enclave costero.