Salario Mínimo Interprofesional

La subida del SMI hasta los 1.272 euros beneficiaría a medio millón más de mujeres

Los sindicatos UGT y CCOO sugieren elevar el sueldo base en un 7,5%, 89 euros más respecto a los 1.184 actuales, aunque reconocen por vez primera su tributación

El número de mujeres que cobraría la prestación aumentaría en un 30%
KiloyCuarto

Con la subida del Salarió Mínimo Interprofesional (SMI) que plantean UGT y CCOO, alrededor de 480.000 mujeres más en España pasarían a cobrar el sueldo base. La propuesta sindical para 2026 contempla un incremento del 7,5%, y situaría la renta mínima en 1.272 euros brutos al mes, repartidos en catorce pagas. Según los datos compartidos por el Ministerio de Trabajo, cerca de 1.579.000 trabajadoras -de las más de 10,3 millones- perciben el SMI actual, fijado en 1.184 euros al mes. La cifra refleja que algo más del 15% del total de mujeres en activo ingresa hoy la retribución mínima.

Los datos de distribución salarial por deciles publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que el 20% de las empleadas gana menos de 1.272,4 euros mensuales, el umbral que fija la propuesta sindical. Por lo que el aumento planteado por UGT y CCOO haría que casi medio millón de trabajadoras alcanzara el nuevo salario mínimo. Es decir, un 30% más de las actuales. El cálculo, aunque se trata de una aproximación basada en deciles y promedios, ofrece una idea clara del alcance de la medida.

El secretario de Acción Sindical y Transiciones Estratégicas de CCOO, Javier Pacheco (i), y el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján (d).
UGT

El incremento propuesto por los sindicatos, que será trasladado al Gobierno en la próxima mesa de diálogo social, supondría una subida de 89 euros respecto al SMI vigente. Además, permitiría que, tras la correspondiente tributación, los perceptores del salario mínimo siguieran recibiendo el equivalente al 60% del salario medio, tal como marca la Carta Social Europea.

Tributación

Con esta actualización, el SMI neto para 2026 alcanzaría los 1.216 euros mensuales una vez aplicado el pago fiscal, lo que representa un 2,7% más que en 2025. Así lo detallaron en rueda de prensa el secretario de Acción Sindical y Transiciones Estratégicas de CCOO, Javier Pacheco, y el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján.

Se trata de la primera vez que los delegados de ambas agrupaciones consideran el pago del IRPF en estas nóminas. “No es de recibo que umbrales de salarios que están cada vez más cercanos a los mínimos de los convenios colectivos, tengan una diferenciación de tributación que pueda generar una discriminación entre trabajadores”, ha justificado Pacheco. Quien ha añadido que el SMI tiene que servir al mismo tiempo para impulsar el resto de sueldos al alza.

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
EFE

En este sentido, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, afirmó ayer en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que la propuesta de CCOO y UGT para subir el SMI “se alinea” con la petición que se hizo desde el Ministerio de Trabajo al comité asesor responsable. Díaz defendió que, al incorporar la tributación al cálculo, “la subida será relevante”. Y denunció la presión fiscal que supondría: “Es muy injusto que esas rentas salariales que se encuentran en una horquilla de entre 17.000 y 21.000 euros, su tipo marginal sea el mismo que el de una renta salarial de 100.000 euros”.

Una subida “modesta”

Por otro lado, a los sindicatos la subida les resulta “modesta” en comparación con el incremento de los rendimientos empresariales. “El 7,5% es inferior a cómo se han incrementado los beneficios de las empresas en 2025. La media -según acredita la Agencia Estatal de la Administraciónestá en el 8,2%”, argumentó Lujan durante su intervención.

Además, el secretario de UGT reconoció que “no puede ser que siendo la cuarta economía europea estemos en el séptimo puesto en cuanto a SMI”. Y denunció que si se incorpora a los cinco países que no lo tienen -Suecia, Finlandia, Dinamarca, Austria e Italia- “ocuparíamos el 12”.

Luján ha explicado que, con arreglo a Eurostat, el salario medio en España está en el entorno de 32.500 euros brutos anuales en 2024. Así, el 60% equivaldría a 19.500 euros. Lo que está por encima de la petición sindical, ya que las asociaciones proponen un alza hasta los 17.822 euros anuales. “No nos parece que seamos nada ambiciosos. Si nos comparamos con Europa, Luxemburgo tiene 2.704 euros brutos al mes, Irlanda 2.282 euros, Países Bajos 2.246 euros, Bélgica 2.112 euros y Francia 1.802 euros”, ha apuntado Luján.

Limitar la absorción de complementos

Asimismo, CCOO y UGT han condicionado cualquier acuerdo sobre el SMI a reformar la normativa para evitar que las empresas sigan compensando las subidas mediante complementos y pluses. Según detallaron, esta práctica impide que el incremento del salario mínimo “sea real” y provoca que muchos trabajadores con sueldos modestos terminen con “subida cero”.

El secretario de Acción Sindical y Transiciones Estratégicas de CCOO, Javier Pacheco, durante la rueda de prensa.
UGT

Para entenderlo de forma sencilla: hasta ahora, un trabajador que cobra 1.200 euros al mes, repartidos entre 1.080 euros de salario base y 120 euros de plus, podría no ver reflejada el alza del SMI en su nómina. Si el sueldo mínimo sube a 1.100 euros, la empresa podría reducir parte del plus para que el salario total siga siendo prácticamente el mismo. Así, aunque oficialmente el SMI haya aumentado, el trabajador no recibe un incremento.

Por ello, los sindicatos, aunque no piden prohibir toda absorción, solicitan limitarla. “Podrá compensarse entre peligrosidades, pero siempre en conceptos homogéneos. Lo que no cabe es ajustar la subida del salario con cualquier otro plus que se perciba“, han subrayado.

También reclaman incorporar a la legislación una definición reforzada de la estructura salarial y utilizar el Observatorio de Márgenes Empresariales como referencia en la negociación colectiva. Para ellos, mantener la absorción universal sería “un tiro en el pie”. Y contravendría el compromiso adquirido por el Gobierno en la última subida del SMI.