El lunes 7 de julio llega con un nuevo capítulo en el calendario litúrgico de la Iglesia Católica, que dedica cada jornada a recordar a santos y beatos cuya vida y obra dejaron una huella profunda en la historia de la fe cristiana.
Algunos de ellos fueron mártires, otros dedicaron su vida al servicio de los más necesitados, a la predicación o a la vida contemplativa.
La fecha de hoy no es una excepción: el 7 de julio se honra a varios santos, entre los que destaca especialmente San Fermín de Amiens, uno de los patrones más populares de España y figura central de las conocidas fiestas de San Fermín en Pamplona.
San Fermín de Amiens, el santo más celebrado del 7 de julio
Aunque su festividad litúrgica oficial se conmemora el 25 de septiembre, en Pamplona se le rinde homenaje el 7 de julio, día en que comienza una de las celebraciones más conocidas a nivel mundial: los Sanfermines. La elección de esta fecha no tiene base litúrgica, sino histórica y popular, ya que fue el día elegido desde el siglo XVI para organizar las celebraciones en su honor en la capital navarra.
San Fermín, nacido en el siglo III, fue el primer obispo de Amiens (Francia), ciudad a la que llegó tras ser bautizado y ordenado sacerdote por San Saturnino. Posteriormente fue martirizado por predicar el cristianismo en tiempos del Imperio romano. Su figura es símbolo de fe, valentía y compromiso evangelizador.
En Pamplona, hoy 7 de julio, miles de personas celebran su día con una mezcla de religiosidad, tradición y fiesta, destacando los famosos encierros de toros, que cada año atrae la atención internacional.
Otros santos que se conmemoran este 7 de julio
Además de San Fermín, el santoral católico recuerda hoy a una serie de santos y beatos que también tienen un lugar en la memoria de la Iglesia:
- San Claudio de Besançon: Obispo y abad del siglo VII en la región de Borgoña, Francia. Fue un reformador monástico y es venerado como patrono de los relojeros y joyeros.
- San Vilibaldo de Eichstätt: Obispo y misionero anglosajón del siglo VIII. Fue una figura clave en la evangelización de Baviera y es conocido por su colaboración con su hermana, Santa Valburga, y su hermano, San Vunibaldo.
- San Odón de Urgel: Obispo catalán del siglo IX. Se le recuerda por su labor pastoral en la región de los Pirineos y por promover la vida cristiana entre sus feligreses.
- Beata María Romero Meneses: Religiosa salesiana nicaragüense que desarrolló su labor en Costa Rica durante el siglo XX. Dedicó su vida a la educación y la ayuda a los pobres, y fue beatificada por el papa Juan Pablo II.
- Beato Pedro To Rot: Laico y mártir de Papúa Nueva Guinea. Fue asesinado en 1945 por oponerse al paganismo y defender el sacramento del matrimonio durante la ocupación japonesa en la Segunda Guerra Mundial.
¿Por qué se celebra el santoral?
El santoral católico tiene un papel fundamental en la vida de millones de creyentes. No solo ofrece modelos de vida cristiana, sino que también marca tradiciones locales, festividades religiosas y culturales, y celebra a aquellas personas que llevan el nombre de algún santo o santa.
Felicitar el santo o onomástica es una costumbre muy extendida en España y América Latina, y muchas localidades celebran fiestas patronales coincidiendo con la festividad de su santo protector.
Un día para honrar el legado espiritual
El 7 de julio es una fecha marcada por la devoción a figuras que, desde distintos contextos históricos y lugares del mundo, han contribuido al fortalecimiento de la fe y los valores cristianos.
Especial mención merece San Fermín, cuya memoria trasciende lo puramente religioso y se ha convertido en uno de los iconos festivos y culturales más conocidos de Pamplona. Sin embargo, más allá del bullicio y el folklore, su figura sigue siendo ejemplo de entrega y predicación, valores que comparten muchos de los santos que se recuerdan hoy.