La activista sueca, Greta Thunberg, da un nuevo paso en su nueva lucha tras el medioambiente, la causa palestina. Tras haber sido detenida en aguas internacionales por Israel en junio, la joven ha organizado un nuevo desembarco hacia Gaza. Pero esta vez, la Global Sumud Flotilla partirá hacia Gaza el 31 de agosto desde España.
Docenas de barcos, en los que personalidades de hasta 44 países como Liam Cunningham, Susan Sarandon participan, partirán hacia Gaza para tratar de romper el bloqueo israelí y asegurarse de que llegue la ayuda humanitaria.
La mayor movilización contra el asedio a Gaza
En un vídeo de tres minutos en la cuenta oficial del movimiento de la Flotilla, hay un mensaje en común entre todos los participantes. El cerco israelí tiene que acabar ya. Y es trabajo de todos y todas unirnos para poner fin al genocidio en Gaza.
Para ello, el comité organizativo, compuesto por siete mujeres y cinco hombres, harán uso de un grupo indefinido de barcos, se esperan decenas de ellos, para llegar a Gaza. Una vez allí, pretenden abrir un corredor humanitario y romper el bloqueo impuesto por Israel.

El 31 de agosto partirán desde Valencia, y se unirán a otra delegación en el Magreb que partirá desde Túnez el 4 de septiembre. Los organizadores, en su vídeo de presentación, se unen a celebridades y activistas como Greta Thunberg y Susan Sarandon para pedir la colaboración internacional. La participación está abierta a todo aquel que quiera formar parte mediante un formulario en su web oficial.
Es la mayor movilización pro-palestina desde que comenzase el sitio a Gaza hace 18 años. Se trata también de la mayor flota civil organizada de la historia.
La organización
Se definen como una coalición de personas comunes y corrientes que creen en la dignidad humana y en el poder de la acción no violenta. Entre ellos hay organizadores, humanitarios, médicos, artistas, clérigos, abogados y un largo etcétera.
En junio, lanzaron una primera movilización coordinada a nivel mundial por tierra, mar y aire. Sus esfuerzos se basan en décadas de resistencia palestina y solidaridad internacional. Aunque pertenecen a diferentes naciones, religiones y creencias políticas, les une una sola verdad: el asedio y el genocidio deben terminar.

Cuentan también con delegaciones nacionales para organizarse regionalmente y ejercer presión a los organismos gubernamentales de su país. La delegación española, por su parte, ha recordado al Gobierno y al presidente Pedro Sánchez sus responsabilidades ante esta situación.
España, como parte de los Convenios de Ginebra y del Estatuto de Roma, tiene la obligación de sancionar las violaciones del derecho internacional humanitario. Por ello, desde la delegación española exigen al Gobierno la condena del asesinato de los periodistas recientemente y la ruptura de toda colaboración con Israel.
Cabe recordar que Israel ha matado a más de 62.000 palestinos y ha herido a más de 150.000 tras más de 22 meses de guerra. Más de 200 personas, casi la mitad niños, han muerto a causa de la hambruna provocada por Israel, y están entrando menos del 20% de camiones de ayuda humanitaria que deberían.