Gasto militar

España, entre la presión de Trump y el giro militar de la UE

Las amenazas arancelarias de Washington a Madrid llegan cuando Bruselas impulsa su hoja de ruta de defensa para 2030

Rutte
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, saluda a la ministra de Defensa de España, Margarita Robles
Efe

Tras la amenaza del presidente estadounidense, Donald Trump, con imponer aranceles a los productos de España en represalia por la negativa de Madrid a cumplir el nuevo objetivo de gasto en defensa de la OTAN, (5% del PIB), se han reavivado las tensiones transatlánticas. La advertencia llega en un momento delicado, justo cuando la Alianza Atlántica busca reforzar su disuasión frente a Rusia y mantener la unidad en torno a Ucrania.

En declaraciones a los periodistas en Washington, Trump dijo el martes que la posición de España era “irrespetuosa con la OTAN”, calificándola como el único Estado miembro que rechaza el objetivo del 5% acordado en la cumbre de la OTAN celebrada en La Haya en junio. “Podría imponerles sanciones comerciales mediante aranceles”, afirmó Trump. “Creo que deberían ser castigados por ello”.

Mark Rutte con Margarita Robles en la reunión de la OTAN
EFE

Las declaraciones provocaron una respuesta inmediata, aunque mesurada, por parte de Bruselas. La Comisión Europea, que se encarga de la política comercial del bloque, advirtió de que la UE “respondería adecuadamente” a cualquier medida estadounidense dirigida contra uno de sus Estados miembros.

“Todos los países de la UE están sujetos a una política comercial común”, afirmó Olof Gill, portavoz de Comercio de la Comisión. “Responderemos adecuadamente, como siempre hacemos, a cualquier medida tomada contra uno o varios de nuestros Estados miembros”.

El equilibrio de España

Las palabras de Trump reabren un viejo debate sobre el papel de España dentro de la Alianza. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha tratado de defender la postura de su Ejecutivo, argumentando que el objetivo de defensa del 5% —dividido en un 3,5% para gastos básicos de defensa y un 1,5% para inversiones relacionadas— era “irrazonable” para un país que solo recientemente ha alcanzado el anterior objetivo del 2% de la OTAN.

OTAN
Mark Rutte con Catherine Vautrin
Efe

“Alcanzar el 5% significaría recortar drásticamente el gasto social, algo que nuestro Gobierno no está dispuesto a hacer”, escribió Sánchez en una carta dirigida al secretario general de la OTAN, Mark Rutte, antes de la cumbre de junio.

Aunque el comunicado final se suavizó para permitir una mayor flexibilidad, lo que en la práctica eximió a España de un compromiso vinculante, Trump ha expresado en repetidas ocasiones su enfado por lo que considera una exención española. En un momento dado, sugirió que España debería ser “expulsada” de la Alianza.

Robles rebaja la tensión

La ministra de Defensa de España, Margarita Robles, ha tratado de rebajar la tensión generada tras las declaraciones de Trump. “Puedo decir que en 2025 España está cumpliendo su obligación asumida en el 2014. Lo que pase en el 2030 o en el 2035, creo que absolutamente nadie lo puede saber”, ha indicado. “La expulsión de España de la OTAN no es posible”, ha aseverado Robles, para quien “España es un aliado serio, fiable, responsable y comprometido”.

Rutte elogia el papel de Trump, pero defiende a España

El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, en declaraciones tras una reunión de ministros de Defensa en Bruselas, trató de calmar la polémica. “El presidente Trump fue extremadamente importante para que la cumbre de la OTAN fuera un éxito”, afirmó Rutte. “Sin él, nunca habríamos llegado al resultado del 5%. España aceptó totalmente los objetivos de capacidad. Es importante señalarlo“, respondió el secretario general.

Rutte también hizo hincapié en la unidad dentro de la alianza y en la confianza en la Lista de Requisitos Prioritarios de Ucrania (PURL), una iniciativa para financiar las armas y el equipo suministrados por Estados Unidos a Ucrania. Seis países -Alemania, Canadá, Países Bajos, Suecia, Dinamarca y Noruega- ya han prometido alrededor de 2.000 millones de euros, por debajo de los 3.500 millones que esperaba el presidente Zelenski.

“Estoy realmente convencido de que contamos con el apoyo de los aliados”, afirmó Rutte. “Más de la mitad de los miembros de la OTAN se han comprometido, lo que garantiza este flujo crucial de apoyo a Ucrania”.

El secretario general de la OTAN, Mark Rutte
EFE/KiloyCuarto

El despertar de la defensa europea

La disputa transatlántica se produce en un momento en que la Unión Europea se prepara para dar a conocer su plan militar más ambicioso hasta la fecha. Según un borrador de la Hoja de ruta para la preparación de la defensa 2030, al que ha tenido acceso Politico, los países de la UE tendrán cinco años para prepararse para un posible conflicto, creando una “postura de defensa europea fuerte” capaz de disuadir a los adversarios antes de que termine la década.

La hoja de ruta prevé una inversión total de 800.000 millones de euros, incluidos préstamos y programas industriales, e insta a los Estados miembros a adquirir conjuntamente al menos el 40% de las armas para 2027. También establece el objetivo de que el 60% de las compras de armas procedan de empresas europeas o ucranianas para 2030.

El plan incluye varios proyectos emblemáticos: el Escudo Aéreo Europeo, el Escudo Espacial de Defensa y la Vigilancia del Flanco Oriental, sistemas diseñados para reforzar la defensa colectiva de Europa desde el aire, la tierra y el espacio.

Trump
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump
Efe

Si bien la hoja de ruta subraya que los gobiernos nacionales seguirán siendo “soberanos en materia de defensa nacional”, también señala un papel más firme de la UE en los asuntos militares, que podría complementar o complicar la estructura de mando tradicional de la OTAN.

El panorama general

Para España, la convergencia de las presiones de Washington y Bruselas supone una delicada prueba. Madrid ya contribuye con tropas al flanco oriental de la OTAN y es un firme apoyo político de Ucrania, pero su gasto en defensa -alrededor del 2,1% del PIB- está por debajo del nuevo objetivo de la OTAN.

Margarita
La ministra de Defensa, Margarita Robles, atiende a los medios en Bruselas
Efe

Las amenazas arancelarias de Trump, si se llevan a cabo, no solo tensarían las relaciones bilaterales, sino que también podrían desencadenar un enfrentamiento comercial más amplio entre la UE y EE  UU, que recordaría a las disputas durante su primer mandato.

Un mensaje para España

“Europa no puede permitirse ignorar las amenazas procedentes de otras partes del mundo”, advierte la hoja de ruta de la UE en materia de defensa, un velado recordatorio de que la inestabilidad en Oriente Medio y el norte de África, y no solo en la órbita de Rusia, condiciona las perspectivas de seguridad de España.

A medida que la OTAN y la UE aceleran la integración en materia de defensa, España se enfrenta a una decisión compleja: contentar a sus socios de gobierno o reforzar la solidaridad aliada.